Unas cien personas se concentraron este jueves en el Ayuntamiento de La Bisbal d'Empordà, Girona, en un acto en recuerdo de la bebé de 20 meses muerta en su casa cuando una bola de granizo la golpeó. Los padres de la pequeña quisieron asistir pero la madre empezó a sentirse mal y sufrió un desvanecimiento.
Al minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento de La Bisbal d'Empordà por la niña fallecida asistieron el alcalde, Enric Marquès, la que hasta ayer era alcaldesa accidental, Carme Vall, varios representantes municipales y los padres y familiares de la pequeña, que han repartido globos blancos entre los asistentes.
Al terminar el acto, los asistentes quisieron acercarse a los padres de la bebé para dárles el pésame. En ese momento, la madre empezó a sentirse mal y sufrió un desvanecimiento. La mujer tuvo que ser atendida en el edificio consistorial.
Con solo 20 meses la pequeña estaba jugando en el patio trasero de su casa con su padre cuando empezó la repentina y violenta tormenta de granizo. Una de las primeras bolas de hielo, de 11 centímetros, que cayó del cielo impactó contra la niña, que fue trasladada rápidamente al hospital pero que finalmente falleció.
Los padres de la menor están siendo acompañados y recibiendo apoyo psicológico en todo momento.
La muerte de esta bebé no ha sido lo único que ha habido que lamentar. Otro menor de 13 años resultó golpeado con una rama de un árbol en Vilanova del Camí, Barcelona. Aunque sigue en la UCI, ya ha despertado aunque no recuerda nada de lo que le pasó.
El temporal causó heridas a mucha gente, pero también daños materiales de los que aún no se han recuperado en Cataluña. Hay tejados, coches, ventanas y mucho mobiliario urbano destrozado.
Tras la tormenta de principios de semana en Cataluña, hoy se esperan nuevas lluvias en la región aunque esta vez no serán tan violentas.