Lucha sin tregua contra el pavoroso incendio de Vall d'Ebo, en Alicante, el peor en la Comunidad Valenciana en una década. Las llamas han quemado más de 11.000 hectáreas y siguen avanzando, sin control, aunque se ha ralentizado su avance gracias a la humedad de la zona. Hay cuatro municipios desalojados.
El fuego afecta al Vall d'Ebo, al de Gallinera y al de Alcalá. Se han quemado 11.00 hectáreas y 2.000 vecinos están desalojados desde el domingo. El perímetro alcanza ya los 80 kilómetros.
Las predicciones auguraban este miércoles condiciones más positivas por la humedad, y un avance de las llamas más lento. El viento y alguna tormenta seca durante esta madrugada han complicado las labores de extinción terrestre. Ahora la humedad empieza a ayudar a los bomberos en su trabajo.
A primera hora de este miércoles 30 dotaciones de Bomberos de Alicante, 13 unidades de bomberos forestales de la Generalitat y cuatro brigadas del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia seguían luchando contra las llamas que se desataron el pasado sábado.
Los vecinos desalojados han explicado que se veía como el fuego se dirigía hacia ellos claramente. “Nos han dado apenas cinco minutos para evacuar”, cuenta uno de ellos.
A primera hora de este miércoles continuaban en la zona unas 30 dotaciones del Consorcio Provincial de Bomberos de Alicante, 13 unidades de bomberos forestales de la Generalitat y cuatro brigadas del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia
Desde las siete de la mañana se han incporado a las tareas de extinción en la Vall d'Ebo diez medios aéreos de la Generalitat, cinco del Gobierno, un helicóptero de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y otros efectivos de Murcia y Castilla-La Mancha.