Adiós a la merienda y a la cena: “El ayuno intermitente no es ninguna dieta milagro, es un estilo de vida”
Se puede ayunar durante 12 o 16 horas al día, pero siempre con coherencia y teniendo muy en cuenta las necesidades de cada persona, aseguran los especialistas
Lo que no sirve de nada es hacer ayuno y luego alimentarse con comida basura, subrayan
Esta práctica no está indicada para embarazadas, personas con trastorno de la conducta alimentaria y pacientes con diabetes tipo 1
El ayuno intermitente se ha convertido en uno de los métodos de moda para perder peso. Una práctica que consiste en dejar de comer durante unas horas al día o durante algunos días de la semana. Según centros como la Clínica Mayo, en Estados Unidos, puede ser más eficaz que una dieta baja en calorías. Así lo indica también un estudio publicado en la revista médica Jama Network.
Los participantes en el ensayo que ayunaron durante al menos 16 horas diarias, es decir, no merendaban ni cenaban, adelgazaron más que quienes no suprimieron esas comidas. Según lo documentado por la doctora Humaira Jamshed, de la Universidad de Alamaba, en Birmingham (EE.UU.), durante las 14 semanas que duró el estudio, el ayuno intermitente fue más efectivo para luchar contra la obesidad y la hipertensión que comer durante un período de 12 o más horas al día. Entonces, ¿en qué lugar quedan las otrora tan saludables cinco comidas diarias?
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Ayuno, alimentación saludable y ejercicio físico
En el caso de Daniela Estefanía Trifu, médico especialista en Endocrinología y Nutrición del Hospital Comarcal de Melilla, esas cinco comidas quedaron olvidadas hace años. Ella no solo recomienda el ayuno intermitente a sus pacientes, adaptándolo a sus características individuales, sino que ella misma lo lleva a la práctica. “Soy muy fan -asegura a NIUS- no solo por los estudios ya publicados, sino por mi propia experiencia”. Aunque ello no significa que sea una dieta milagro, subraya.
De hecho, recalca, no considera que sea una dieta, sino un estilo de vida, unos hábitos que tienen que ir acompañados de otros tan fundamentales como ingerir alimentos saludables y hacer ejercicio. “No pretendo para nada que se haga apología del ayuno intermitente, esto no es una moda, la moda es estar todo el día en el supermercado y cenar a las 10 de la noche, lo que hay que hacer es actuar con coherencia y equilibrio entre el tiempo que se ingiere alimentos y la calidad de los mismos”, indica la especialista.
¿Quiénes y cómo se puede hacer ayuno intermitente?
Tal y como detalla la doctora Trifu, se puede hacer un ayuno durante 12 o 16 horas al día cenando a eso de las 20h, o haciendo una comida-merienda-cena. Depende de cada caso, asegura la endocrina, pero siempre con coherencia, insiste, y teniendo en cuenta las características y necesidades de cada persona. Por ejemplo, en casa con niños para dar buen ejemplo podría estar bien cenar todos juntos pronto para dejar descansar el cuerpo de la ingesta de alimentos durante al menos doce horas. Quienes no pueden hacer ayuno intermitente, advierte, son:
- Las personas con trastorno de la conducta alimentaria (TCM).
- Embarazadas.
- Pacientes con diabetes tipo 1.
Para Luís Morán, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas, el ayuno intermitente es una herramienta más para perder peso y no es ni mejor ni peor que otras. Según el dietista nutricionista, también existen estudios que indican que es más efectiva una dieta hipocalórica de tipo mediterránea. El estudio publicado en Jama es uno más de las tantas metodologías existentes a la hora de perder peso: las dietas que son más altas en proteínas y bajas en grasas, o las dietas cetogénicas keto, bajas en hidratos de carbono, explica el especialista.
Encontrar la estrategia ideal
“Lo ideal es ver y estudiar cuál es la estrategia nutricional más acertada para cada caso singular”, asegura Carlos Rodríguez Valverde, director del centro de nutrición y dietética Nutrygente. En su centro de Sevilla ya se están preparando para afrontar uno de los grandes picos de la temporada, la vuelta del verano con sus kilos de más y reconoce que el ayuno intermitente es, junto con la dieta cetogénica, una de las que están de moda, pero es una estrategia más, coincide. Una herramienta que puede ser efectiva ya que, al reducir las horas de ingesta, se reduce también la posibilidad de ingerir calorías de más, aunque si no existe un déficit calórico no se va a conseguir perder grasa corporal, advierte. Lo que no sirve de nada es hacer ayuno, pero luego alimentarse con comida basura, subrayan los especialista consultados por NIUS.
Según Luis Morán, miembro de la Junta de gobierno del colegio profesional de dietistas-nutricionistas de Andalucia, la evidencia científica dice que, a corto plazo, no hay una mejor que otra, pero sí que todas estas metodologías deben desembocar en una dieta y unos hábitos de alimentación saludables, equilibrados y con la práctica regular de ejercicio físico. “Vamos a encontrar pacientes a los que un ayuno intermitente les va a venir mejor y otros a los que le puede venir otras opciones. Al fin y al cabo son herramientas que bien utilizadas pueden ayudar a lograr un peso más saludable”, asegura.
¿Tiene el ayuno intermitente efecto rebote?
“El problema es cuando estas dietas, como la keto o la del ayuno intermitente, se ponen de moda y no se enfocan bien ya que se ven como dietas milagro. De ello hay defensores a ultranza, como los de hinchas de un equipo de fútbol. Pero, hoy por hoy, no se sabe bien qué puede pasar con el temido efecto rebote, con el mantenimiento del peso perdido cuando abandonan el ayuno intermitente, o qué ocurre si continúan durante mucho tiempo con este tipo de alimentación”, reconoce Morán. De hecho, al tener menos tiempo para ingerir los nutrientes necesarios como calcio, hierro, vitaminas…, puede conllevar déficits si no se planifica bien.
Además, recuerda Carlos Rodríguez Valverde, hay que tener especial cuidado también con las personas que puedan tener trastornos de la conducta alimentaria (TCA). Para una persona con TCA el ayuno intermitente puede ser peligroso, por eso decimos que hay que tener muy en cuenta la singularidad del paciente. A una persona con un trastorno de este tipo, restringirle alimentos concretos u horarios de comida puede afectar negativamente a su tratamiento. A veces se llegan a extremos tales que provocan trastornos en la alimentación ya sea en forma de atracones o de alteraciones del ánimo, por eso es muy importante ver a qué pacientes se les puede recomendar ayuno intermitente.
Lo que está claro, concluye Daniell Estafanía Trifu, es que, teniendo en cuenta la pandemia de obesidad, no se están haciendo las cosas bien. "En la historia de la humanidad, nunca se ha comido cinco veces al día, desde el punto de vista nutricional hemos involucionado y estamos completamente desfasados", asevera la endocrina.