El testimonio de una joven inyectada con burundanga: "Sentí un quemazón, un cansancio enorme y me quedé dormida"

  • La Facultad de Estudios Sociales y Trabajo de la Universidad de Málaga ha realizado un estudio con el objetivo de analizar la perspectiva de género en el ocio nocturno.

  • El 90% de las jóvenes reconoce que tiene miedo a una agresión sexual cuando sale de fiesta

  • Al 70% de los hombres no les preocupa en absoluto sufrir una sumisión química

Aumenta la preocupación ante la oleada de pinchazos para provocar sumisión química. Las denuncias se repiten y el 90% de las jóvenes reconoce que tiene miedo a sufrir una agresión sexual cuando sale de fiesta. La Facultad de Estudios Sociales y Trabajo de la Universidad de Málaga y la Asociación Cívica para la Prevención han realizado un estudio con el objetivo de analizar la perspectiva de género en el ocio nocturno.

Las encuestas se han realizado por las noches en las zonas de ocio más concurridas, donde se han entrevistado a 561 jóvenes, 283 mujeres y 277 hombres, con una edad media de 23 años. De todos los entrevistados, el 51,5% está estudiando, el 17,5% trabajando y el 26,4% estudia y trabaja. Informativos Telecinco habla con una joven que ha sufrido en sus carnes la sumisión química.

Le ocurrió en un viaje a Malta, pero los casos en España aumentan y la llegada del verano no es la mejor época para que remitan. A esta joven la drogaron en su viaje de fin de curso. ¿Qué sintió? Lo cuenta siendo menor para que otras chicas también sean capaces de reaccionar al saber los síntomas. A los pocos minutos empezó a notar un "agotamiento extremo". Le habían inyectado burundanga. En las discotecas, de hecho, ya se han puesto incluso tapas en las bebidas para evitar que esa droga sea añadida en las copas.

Noté que me pinchaban en el brazo creía que me habían quemado, me quedé dormida profundamente

A esta menor, el pinchazo le ocurrió en Malta, pero en las últimas semanas aquí en España se han disparado las denuncias por sumisión química. "Noté que me pinchaban en el brazo creía que me habían quemado, me quedé dormida profundamente. La gente tiene que saberlo". Según un estudio de la Universidad de Málaga el 23% de las chicas conoce a alguna persona a la que han drogado para abusar sexualmente de ella. No solo son pichados, a veces se altera el contenido del vaso.

Uno de cada 10 jóvenes cree que alguien ha vertido alguna vez en su bebida una sustancia para manipularlo. Al 90% de las mujeres cuando salen de fiesta les preocupa el riesgo de sufrir un episodio de violencia sexual. Para la mayoría de los hombres no es una preocupación .

El 70,8% de los encuestados consideran que es más probable que ellas sufran una sumisión química. Por otro lado, el 23% de las entrevistadas mantienen que conocen a alguna persona a quien han drogado para abusar sexualmente de ella, dato que se sitúa seis puntos por encima que el de los hombres, ya que solo el 17% conocen a alguien que haya sufrido este tipo de agresión. A día de hoy, el 72,9% de estos jóvenes mantienen que los pubs, bares, discotecas, ferias o festivales no son espacios igualitarios. Ellas tienen lamentablemente más miedo.

Temas