Nueva denuncia por un presunto intento de sumisión química a mujeres. Hace unos días fue en los Sanfermines, ahora en Vitoria. Según ha informado el programa de televisión 'Cuatro al Día', dos jóvenes sufrieron la madrugada del sábado sendos pinchazos que les provocaron mareos y aturdimiento en un local de ocio.
Todo ocurrió alrededor de las 04:00 horas de la madrugada del pasado viernes. Fue por una zona de la calle Florida, en Vitoria, donde las dos chicas recibieron el pinchazo.
Concretamente, en un local de ocio nocturno que ahora permanece con la persiana cerrada. Una de las jóvenes recibió el pinchazo en el cuello y la otra en el muslo. Ambas inmediatamente empezaron a sentirse mareadas y, por eso, dieron la voz de alarma.
Gracias a que estaban acompañadas, consiguieron salir del local y fueron trasladadas al Hospital de Txagorritxu, en Vitoria. Una de las preocupaciones era que hubieran sido contagiadas de cualquier patógeno a través de la aguja y es que, pese a la rápida actuación, todavía no ha se ha podido determinar el tipo de sustancia ya que este tipo de drogas desaparece rápidamente de nuestro organismo. Ahora la Ertzaintza continúa la investigación para dar con el presunto autor.
Tras tener constancia de lo sucedido, varias patrullas de la Policía autonómica se desplazaron al lugar de los hechos para comprobar lo sucedido. Una vez en el local, el dispositivo decidió evacuar a las dos víctimas al Hospital de Txagorritxu de la capital alavesa para evaluar los posibles daños y tratar de acotar daños mayores.
Varios estudios realizados en España apuntan a que el alcohol está presente en un 80 % de los delitos de sumisión química, y el 20 % restante corresponde a las benzodiacepinas, el GHB o éxtasis líquido, la ketamina y de forma muy limitada la burundanga.
Expertos consultados por la EFE afirman que, a pesar de que en el imaginario social existe la creencia de que la mayor parte de los sometimientos con sustancias los realizan desconocidos, la realidad es otra ya que, en fiestas o en salidas de ocio, "tanto en casos de sumisión química como en abusos y agresiones sexuales, en el 80 % están implicados conocidos", afirma Inmaculada Moreno, psicóloga de la Asociación AMUVI.
Los casos denunciados recientemente en España coinciden con otros similares ocurridos en Francia. El diario francés La Press informaba de un aumento de ataque con jeringas en lo que va de año, especialmente aprovechando las celebraciones de festivales de verano.
Según este medio, más de mil personas habían denunciados estas agresiones sexuales con jeringa que han sustituido a la ya conocidas de añadir una sustancia en la copa de la víctima. Algunos testimonios reportados por este medio afirman haber notado un pinchazo en el brazo seguido de problemas para respirar, mareos y náuseas.
La preocupación de las autoridades ante este tipo de agresiones sexuales ha activado un plan de investigación e inversiones que busca mejorar la capacidad de detección de sustancias químicas en sangre. En esta línea se ha presentado una herramienta de muestras para el análisis toxicológico en casos de sumisión química. Consistente en un pequeño dispositivo fácil de transportar que tiene todo el material necesario para tomar las muestras y preservarlas, así como para garantizar la cadena de custodia.