La Fiscalía turca acusa a una mujer escocesa, de 31 años, de haber matado en un ataque de celos y estando bajo los efectos del alcohol a su novio, de 21 empujándolo por el balcón de la habitación del hotel que compartían.
El caso está en los preliminares judiciales y pendiente de nuevas vistas, pero para el Ministerio Público está claro que el pasado 12 de marzo, Mary Meyers Kayley y Reece Pegram habían estado bebiendo grandes cantidades de alcohol en las dependencias del hotel de cinco estrellas ubicado en turística localidad turca de Side, a orillas del Mediterráneo.
Que la pareja discutió en su habitación porque la acusada descubrió que su novio había vuelto a reencontrarse con una antigua pareja y que esta infidelidad desató en ella un arrebato de celos que la llevó a empujarle por el balcón de la habitación precipitándose al vacío y falleciendo en el acto, tras caer desde una altura de 30 metros.
Los investigadores turcos cuentan con restos de sangre de ella esparcidos por la habitación, aunque en su defensa, la acusada asegura que fue consecuencia de un corte que se hizo en el pulgar mientras se duchaba. Para la Policía, el resto de sangre se produjo durante las relaciones sexuales que mantuvieran previas al incidente mortal.
La investigación también descubrió restos de cocaína en la sangre de la víctima.
La acusada aseguró ante el juez que su pareja era un narcotraficante importante en Inglaterra y que estaba buscando cocaína en Turquía para adquirirla. También relató a los agentes que su novio le había expresado su intención de suicidarse tirándose por el balcón algo que, según su testimonio, logró evitar en aquel momento.
Mary Meyers Kayley se expone a una pena mínima en Turquía de 24 años de prisión, según informa Daily Mail.