Los incendios calcinan España avivados por la ola de calor extremo que atraviesa el país. También al norte, en Ourense, las llamas causan estragos, con desalojos contra reloj. El fuego quema los montes de Carballeda de Valdeorras, donde se espera que hoy los termómetros puedan dar un respiro que ayude a frenar la situación.
En Galicia hay 17 fuegos activos que han calcinado más de 7.000 hectáreas, y este de Ourense sigue fuera de control. Pese a que se creía estabilizado, se reactivó ayer por la tarde con virulencia. Fue un golpe de viento el que provocó que las llamas avanzasen con gran voracidad hacia las localidades de Carballeda y O Barco de Valdeorras.
En total, un millar de vecinos han tenido que ser desalojados, mientras el fuego ha calcinado varias viviendas deshabitadas. Los efectivos desplazados a la zona luchan contra reloj, pero se enfrentan también a la dificultad añadida por la orografía del terreno, junto a las altas temperaturas y la baja humedad ambiental.
Según los últimos datos, el incendio en Caballeda de Valdeorras ha calcinado unas 2.400 hectáreas y la Xunta de Galicia hubo de activar la situación 2 de alerta por proximidad del fuego a un núcleo de viviendas, junto a la parroquia de Candeda, donde la administración autonómica ha confirmado que han ardido varias viviendas abandonadas. Además, varios vecinos de la parroquia de Alixo, en O Barco, han tenido que ser desalojado, según confirmaba Alfredo García, alcalde de la localidad ourensana, quien manifestaba “mucha preocupación” por la situación “muy complicada” provocada por el fuego.
También otras parroquias, como Sandigoso o Soulecín, se han visto afectadas.