Alerta veraniega por el aumento de agresiones sexuales con pinchazos de sumisión química
Los ocho casos de sumisión química denunciados en los sanfermines han dado negativo en las analíticas
La prensa francesa alerta de más de mil denuncias de agresiones sexuales mediante sumisión química
El ministerio de Justicia ha desarrollado un kit para detectar sustancias químicas en la sangre de las víctimas
Las denuncias por supuestos casos de sumisión química han empañado las fiestas de San Fermín concluidas este jueves. Ocho personas han asegurado haber recibido pinchazos durante las celebraciones y haber notado debilidad y mareos, pero las analíticas posteriores no han encontrado restos de sustancias extrañas en sus organismos. En la Comunidad Valenciana también se han registrado tres denuncias, aunque tampoco hay evidencias de que las víctimas hayan sido inoculadas con productos químicos que anulen su voluntad.
Según el ministerio de Justicia, una de cada tres agresiones sexuales en los últimos cinco años denunciadas en España se ha producido bajo los efectos de las drogas o del alcohol. Para la titular de esta cartera, Pilar Llop, este tipo de violencia está cada vez "más extendida" ya sea en cualquiera de sus dos variantes: la oportunista, en la que el agresor aprovecha la falta de voluntad porque la víctima ha consumido algún tipo de sustancia; y la premeditada, en la que es el propio agresor el que la proporciona.
MÁS
Detenido por el maltrato continuado a su mujer en Madrid: utilizó la sumisión química para drogarla
El presunto autor de la agresión sexual en Pamplona, en libertad: asegura que la relación fue consentida
Vasos con tapa, la medida de las discotecas de Cataluña contra las agresiones sexuales con burundanga
Los análisis detectan el 72 % de los casos de sumisión química
Llop aclara que, de las 3.001 agresiones sexuales constatadas por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF) en 2021, se practicaron análisis en 994 ante la sospecha de que pudieran haberse cometido con la víctima bajo sumisión química. "El resultado dio positivo en el 72% de los casos", ha señalado.
Para hacer frente a esta alerta, Justicia ha elaborado un protocolo que bajo el nombre de ‘Guía de buenas prácticas para la actuación forense ante la víctima de un delito facilitado por sustancias psicoactivas: intervención ante la sospecha de sumisión química’, pretende ayudar a los expertos a mejorar sus investigaciones en casos de delitos sexuales y en concreto los cometidos bajo la acción de sustancias.
Según este documento, la sumisión química se lleva a cabo mediante sustancias "de acción rápida y corta duración, activas a dosis bajas, fáciles de obtener y de administrar, que produzcan los efectos buscados: amnesia, sedación, alucinaciones y desinhibición".
Varios estudios realizados en España apuntan a que el alcohol está presente en un 80 % de los delitos de sumisión química, y el 20 % restante corresponde a las benzodiacepinas, el GHB o éxtasis líquido, la ketamina y de forma muy limitada la burundanga.
En el 80 % de los casos de abuso sexual por sumisión química están implicados conocidos
Expertos consultados por la EFE afirman que, a pesar de que en el imaginario social existe la creencia de que la mayor parte de los sometimientos con sustancias los realizan desconocidos, la realidad es otra ya que, en fiestas o en salidas de ocio, "tanto en casos de sumisión química como en abusos y agresiones sexuales, en el 80 % están implicados conocidos", afirma Inmaculada Moreno, psicóloga de la Asociación AMUVI.
Los casos denunciados recientemente en España coinciden con otros similares ocurridos en Francia. Recientemente el diario francés La Press informaba de un aumento de ataque con jeringas en lo que va de año, especialmente aprovechando las celebraciones de festivales de verano.
Según este medio, más de mil personas habían denunciados estas agresiones sexuales con jeringa que han sustituido a la ya conocidas de añadir una sustancia en la copa de la víctima. Algunos testimonios reportados por este medio afirman haber notado un pinchazo en el brazo seguido de problemas para respirar, mareos y náuseas.
Los datos de la Oficina Antinarcóticos de Francia informan de que los motivos para estos ataques siguen sin estar claros, que los agresores casi nunca son identificados y que afectan por igual a mujeres y a hombres.
Otro dato sorprendente y que coincide con lo ocurrido en los San Fermines es que, en los análisis de sangre realizados a las víctimas no se han hallado restos de sustancias químicas que provoquen esos síntomas descritos.
Los expertos recuerdan que un resultado analítico negativo no descarta que se haya producido, por lo que es necesario que las víctimas acudan al hospital lo más pronto posible ante la sospecha de una sumisión química.
Justicia desarrolla un test para detectar la sumisión química y mas inversión
La preocupación de las autoridades ante este tipo de agresiones sexuales ha activado un plan de investigación e inversiones que busca mejorar la capacidad de detección de sustancias químicas en sangre. En esta línea se ha presentado una herramienta de muestras para el análisis toxicológico en casos de sumisión química. Consistente en un pequeño dispositivo fácil de transportar que tiene todo el material necesario para tomar las muestras y preservarlas, así como para garantizar la cadena de custodia.
Más dinero y medidas para investigar este tipo de actos
Además, el ministerio de Justicia ha informado de que en el anteproyecto de Ley Enjuiciamiento Criminal (LeCrim) se regulará por primera vez la cadena de custodia de este tipo de material.
La importancia que desde Justicia se da a la lucha contra las agresiones sexuales mediante sumisión química se refleja las cuentas del departamento de Pilar Llop. Según los datos oficiales, Justicia invirtió 4,3 millones de euros para la adquisición de instrumentos y equipos de alta resolución en 2021 y está previsto que en 2022 se destinen otros 4 millones para nuevos equipos analíticos.
También ha presentado la primera de las tres campañas previstas de comunicación institucional que bajo el lema: "Si te han agredido sexualmente, acude a un centro sanitario”, pretende sensibilizar, visibilizar y avanzar en la prevención y mejora de la asistencia a las víctimas de delitos contra la libertad sexual facilitados por alcohol, drogas de abuso y psicofármacos.
Según la ministra de Justicia, "Queremos que las mujeres dejen de sentir miedo e inseguridad. Que dejen de sentir vergüenza. Que sepan que las instituciones están para ayudarles".