La celebración del Orgullo LGTBI es un momento para reflexionar sobre los avances en el respeto y aceptación de todas las personas independientemente de su identidad y preferencias sexuales. En pleno siglo XXI aún hay muchos ciudadanos que se siente obligados a ocultar su sexualidad por miedo al rechazo o al aislamiento.
Para muchas personas, vivir dentro del armario identitario es una opción de supervivencia. La presión social sigue siendo muy intenta en determinados colectivos y sectores económicos. Las familias, los grupos de amigos juegan un papel fundamental en el reconocimiento de cada uno, por lo que la educación en el respeto y en la diversidad siguen siendo muy necesarias.
Para muchos de los que todavía viven dentro del armario, la libertad es una aspiración a medio camino. Aseguran que a la sociedad aún le queda un gran trecho por recorrer que arranca en la etapa escolar y se prolonga en los hogares y en con los amigos.