Máxima tensión en Santovenia de Pisuerga, en Valladolid, donde un hombre ha acabado con la vida de un amigo y ha dejado herido de gravedad a un Guardia Civil que, en una operación desplegada después de que se atrincherase el autor del disparo, también ha sido tiroteado.
Concretamente, el suceso arrancó durante la pasada madrugada, momento desde el cual el presunto asesino continúa sin salir de una vivienda. El disparo se produjo en las inmediaciones de la calle Alfredo Martín con la calle Marqués de San Felices de Santovenia de Pisuerga, y después el agresor se atrincheró en la vivienda, donde estaba con otra persona como rehén.
El hombre habría disparado a la víctima a bojacarro con una escopeta, provocando su muerte. Horas más tarde, en el marco de una operación en la que participaban negociadores, un teniente coronel de la Guardia Civil, de 53 años, que trataba de mediar con el hombre atrincherado, era también disparado por el agresor.
Tras lo sucedido, la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, ha ofrecido una rueda de prensa para explicar a los medios los detalles que se conocen, momento en el cual ha sido interrumpida por la suegra del fallecido, Encarna, quien al grito de “mentirosos” ha reclamado que se transmita la verdad sobre los acontecimientos y ha denunciado lo ocurrido silenciando a Barcones y ofreciendo su versión.
Tras momentos de máxima tensión, Encarna ha vuelto a hablar con los medios y, desgarrada por lo ocurrido, ha explicado: “Las mujeres discuten a las seis de la tarde: no hay ningún herido, no hay ningún nada, ninguna señal. ‘Puta canuta’. ‘Que yo no he sido, que tú sí has sido, que yo no he sido’. Mi hija se va con su marido a tomarse a un café al bar con un montón de personas que podrían venir y decirles quiénes son, que estuvimos con ellos. Yo me vine a las diez y media. Mi hija se vino a las 11, porque yo quería ver una película. Entonces llegué y vine para casa. Me llamó mi hija y me dijo que vaya, que les han pegado entre seis, que eran: ‘El chiqui’, el asesino con el que están negociando; el cuñado de ‘El Chiqui’, los dos novios de la hija, con la que está liada ‘El Chiqui’ y la hermana. Esos seis le pegaron a mi hija y a mi yerno: mi hija tenía la cabeza abierta, y mi yerno el ojo… que no había quien se le pudiera ver”, cuenta.
Tras ello, relata. “Se fueron a curar al clínico, y sale primero mi yerno, y va su hijo, de 27 años a buscarlo. Viene a casa y le oímos que venía riéndose, porque estábamos pendientes de lo que pasaba. Le digo al niño, que tenía 17 años: ‘mira, tu padre ya viene, hijo. Y viene riéndose’. Tanto preocuparnos por su ojo… Abrimos la puerta, salimos arriba, al tercero, porque vivimos en un tercero, y oímos, (pasando) de las risas (a un)… ¡Pum! Y de repente, un silencio atronador. Y mira que tiene 17 años, y se dio cuenta, y dijo: ‘Abuela, es un tiro’. Y se bajó corriendo. Yo corría menos que él. Me lo encuentro en el primero, con el niqui todo desgarrado, y digo: ‘¿Te ha pegado ese desgraciado?’. Y me dice, no abuela, me lo he roto yo porque mi padre está muerto en el descansillo”, explica, señalando que fue allí donde encontró a su yerno muerto.
Tras verle en el suelo, Encarna cuenta: “Llamo a mi hijo, que vive en el segundo: '¡Toñete, baja, ayúdame, ayúdame con el tapón de sangre!', que salía… Yo necesito oxígeno, y fui corriendo, mandé a una vecina a por ello: ‘Vete a casa a por mi oxígeno, y tráemelo que se lo pongo’. Le puse mi oxígeno. Se lo puse al seis, y mi hijo taponándole la herida. De repente, se le cayó la cabeza, sacó la lengua y se acabó. Ese es el relato verídico”, subraya, apuntando que, sobre "el relato que dice que tiene a dos secuestrados, son los dos novios de las hijas: el novio de una y el novio de la otra”.
“Cuando a mi yerno le pegan el tiro, va con su hijo de 27 años, que ya no ha vuelto a hablar ni quiere hablar con prensa ni con nadie, porque se encuentra tan inútil que dice que cómo no le agarraría la escopeta y la pondría para arriba, o cómo no se la quitó, que se quedó tan quieto… porque dice que fue sacarla y ‘¡pum!, dispararle. Luego le disparó a él, pero dice que (el arma) se quedó agarrotada (encasquillada)”, ha relatado.
El presunto asesino, detenido
Tras más de 12 horas atrincherado, el presunto asesino, Pablo Antonio, alias 'El Chiqui', ha sido detenido. Si bien se había dicho que podía estar con dos rehenes, las autoridades han confirmado que solo era una persona, la cual está sana y salva.