La Audiencia de Barcelona ha condenado a un hombre a nueve años de prisión --que cumplirá en internamiento psiquiátrico mientras necesite tratamiento-- por atacar con una catana a cuatro mossos y amputar cuatro dedos a uno de ellos cuando fueron a buscarle a casa para ingresarle involuntariamente.
La sentencia de la sección 6 del tribunal, consultada este lunes por Europa Press, detalla que el 18 de julio los cuatro policías, junto con sanitarios, fueron a casa del acusado para internarlo involuntariamente en un psiquiátrico por orden de un médico y a petición de su padre, después de que llevara unos dos meses sin medicarse a pesar de estar diagnosticado de esquizofrenia.
Sanitarios y policías entraron en el piso acompañados del padre del acusado, y él al principio no se opuso a que lo internaran, pero cuando fue a la habitación para cambiarse de ropa volvió con una catana, que usó para atacar a los policías "con movimientos bruscos de arriba abajo".
Hirió a un mosso en la mano derecha --al que amputó cuatro dedos-- y a otros dos en el brazo y, el cuarto policía, disparó y le dio al acusado en la mano, tras lo que le cayó la catana y los policías pudieron reducirle.
Además de la condena a prisión o internamiento, los jueces le imponen una indemnización de 24.685 euros para el policía que perdió cuatro dedos, de 11.800 euros para los dos heridos en el brazo y de 1.365 euros para el cuarto.
El tribunal le ha declarado culpable pero en la sentencia ha añadido la atenuante de alteración psíquica teniendo en cuenta su enfermedad mental.