La jueza ha dejado de nuevo en libertad con cargos al actor Luis Lorenzo y su mujer, Arancha Palomino, tras escuchar el testimonio de la ciudadora de la tía de ella, María Isabel Suárez. La familia de la fallecida pedía prisión provisional para ambos. La Fiscalía era contraria.
La jueza de Arganda del Rey, en Madrid, donde se ha celebrado una vistilla a petición de la familia de la fallecida, una anciana de 86 años, ha desestimado la petición de la acusación particular, previo informe de la Fiscalía, contrario a esta medida cautelar.
La familia de María Isabel Suárez pedía el ingreso en prisión del matrimonio formado por el actor Luis Lorenzo y Arancha Palomino basándose en la declaración, como testigo, esta semana de la ciudadora de la anciana. Esta dijo en los juzgados que el estado de la anciana se deterioró muy rápido desde que llegó a Madrid a vivir con la pareja y que ella solo le daba los medicamentos que Arancha le suministraba.
La Fiscalía, pese a ser contraria al ingreso en prisión de los sospechosos, señala que hay " múltiples indicios" de que la muerte de María Isabel fuera un asesinato porque cuesta entender que una anciana sana empeorara su estado en pocas semanas y falleciera tras ser trasladada a Madrid, según informa Okdiario.
La Fiscalía se apoya en los informes de la Guardia Civil que también apuntan a la presencia de metales pesados en grandes cantidades en el cuerpo de la mujer.
La tía de Arancha Palomino murió en junio de 2021 a los 86 años, en el domicilio del matrimonio en Rivas Vaciamadrid. La autopsia, que se realizó gracias a la presión del hermano y otros familiares de María Isabel ante las sospechas que mantenían desde hacía tiempo, reveló que murió envenenada y la etiología de su fallecimiento es “violenta/homicida”.
Por esa razón, a Arancha Palomino y su marido, el actor Luis Lorenzo, se les investiga por un presunto delito de homicidio. María Isabel tenía grandes cantidades de cadmio y manganeso en su cuerpo, y las autoridades investigan con varias pistas que hacen indicar que pudieron acabar con su vida de forma premeditada por la herencia.