Desfase en las inmediaciones de la plaza de toros de Las Ventas, en Madrid. Unos 50 jóvenes vándalos arrasaron la zona tras la corrida y provocaron disturbios en algunos bares. Pedro, el propietario de uno de los locales, ha acabado en el hospital. Cuatro de ellos acabaron detenidos y la Policía trata de localizar a otros de los implicados en las agresiones.
Un grupo de radicales protagonizó graves incidentes en varios bares del barrio de Las Ventas tras causar antes varios altercados en la plaza de Toros durante la corrida de la Juventud de la Feria de San Isidro del pasado sábado. Los vándalos agredieron de gravedad a dos camareros de los locales Casa García y El Ruedo-.
Uno los vándalos intentó llevarse una cabeza de toro. Se lo impidieron. "Les dije que no les servía y se pusieron como locos", dice Pedro que muestra su cuerpo dolorido. Peor parados salieron en otro bar. Allí tras humillar a una indigente estamparon un vaso en la cara a un camarero que le recriminó su actitud. Está ingresado en el hospital y puede que pierda la visión.