Qué es un 'cracker' y cómo puede manipular los frenos de tu coche o arrancarlo sin la llave
Los 'cracker' se han convertido en una gran peligro para los propietarios de los vehículos más tecnológicos y de última generación
Pueden llegar a modificar a distancia, de manera muy sencilla, el software de un vehículo, pudiendo abrirlo, arrancarlo o manipular sus frenos
La DGT ofrece una serie de recomendaciones a los usuarios para que tomen todas la precauciones posibles
Más tecnológicos, más inteligentes, pero también más vulnerables. Hablamos de los coches y motos de última generación, equipados con mecanismos mucho más sofisticados, que hacen que sean más accesibles y cómodos para el usuario, pero a la vez más peligrosos. Pues con su innovadora tecnología se sitúan prácticamente en el ojo de los ciberdelincuentes, conocidos ahora como 'cracker', y de incontables virus malignos que pueden dañar el sistema informático. Y es que cuanto más datos compartimos a travé de Internet y más conectados estamos, más probable es que seamos víctimas de alguno de estos ataques.
Abrir un coche, arrancarlo o manipular los frenos de manera sencilla
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Los 'cracker' pueden llegar a modificar a distancia, de manera muy sencilla para ellos, el software de un vehículo de última generación, lo cual puede hacer que el coche o la moto se abra, arrancarlo o, incluso, manipular los frenos, entre otras 'peligrosas' acciones para el propietario.
En el año 2010 un equipo de investigadores de las universidades de Seattle y de California (EE.UU) demostraron que los coches de última generación eran vulnerables a ciberataques y lograron piratear dos vehículos a los que inutilizaron los frenos y el motor a distancia y cuando se encontraban en marcha. Los ataques fueron multiplicándose hasta que en 2018 el FBI alertó a los fabricantes de que estaban en el punto de mira de los ‘crackers’, tal y como alerta la DGT.
Los fabricantes de componentes, ya en alerta, llevan años trabajando en desarrollar equipos tecnológicos más seguros, inaccesibles para los 'cracker'. En tiempo récord, la ONU ha desarrollado una norma que unifica los criterios y los requisitos, e implanta las bases mínimas de ciberseguridad para todos los vehículos. La norma obliga a que todos –automóviles, camiones, furgonetas, autobuses, autocaravanas, etc.– que se homologuen a partir de julio de 2022 y todos los que se vendan a partir de julio de 2024 cuenten con un certificado de vehículo ciberseguro.
Las recomendaciones para tener un vehículo más ciberseguro
Pero mientras la solución está en camino, lo mejor, como siempre es prevenir. La DGT, junto con los fabricantes de coches, ofrencen una serie de recomendaciones a los usuarios para que mantenga su vehículo lo más ciberseguro posible.
- Tomar conciencia: lo primero fundamental es conocer el problema. Ser consciente de que cuanto más digitalizado esté nuestro vehículo, más vulnerable será. Por eso lo mejor es estar alerta, por si acaso.
- Software actualizado: la mayoría de las veces, las actualizaciones se crean para tapar brechas de ciberseguridad. Es decir, para que el software -y con él el vehículo- este más protegido y blindado ante posibles ataques. Es importante mantener el software actualizado, eso sí, siempre con las versiones proporcionadas por el fabricante.
- Escanear antes de conectar: Cuidado con los dispositivos USB, pues son una de las puertas de acceso más fáciles para la instalación de softwares maliciosos en nuestro dispositivo. Es indispensable pasar el antivirus por cualquier dispositivo USB antes de conectarlo al coche.
- Apagar: todas las conexiones son puertas de entrada y de salida. Desconectar el wifi y el bluetooth cuando no se use es fundamental. También es importante tener en cuenta a quien se ofrece el wifi del vehículo. En este último caso, la actuación más segura es directamente no compartirlo con nadie.
- Ojo con las descargas: el teléfono inteligente está asumiendo cada vez más funciones que antes cumplían otros dispositivos, por lo que es importante siempre controlar qué programas y aplicaciones se descargan en él, para que no se conviertan en un caballo de troya para que los virus maliciosas puedan tomar el control del vehículo.
- Vigila tus llaves: las llaves más modernas permiten controlar multitud de funciones del coche y no solo abrirlo y cerrarlo. Pueden copiar la señal –de manera muy sencilla– cuando se aprieta el botón para abrir y cerrar las puertas. La recomendación es que esto siempre se haga con la llave manual, sobre todo, en sitios que consideremos como no seguros.
- Protege el mando: este paso es una evolución del anterior. Hoy venden bolsas especializadas que impiden acceder a la señal del mando y con las que se evitará que alguien pueda duplicarlo por 'accidente'.
- Cuidado con el OBD2: se trata de un puerto de comunicaciones que permite diagnosticar, programar o codificar múltiples dispositivos electrónicos. Es muy importante saber dónde está y qué hay conectado a él (por ejemplo, algunas aseguradoras ofrecen dispositivos que se conectan al OBD2 para estudiar los hábitos de conducción del usuario y así adaptar el precio de sus seguros). Es una puerta muy tentadora para los cibercriminales.