Siguen aumentando sin parar los contagios de coronavirus en España, y eso que las cifras son muy parciales, dado que no se computan todas las edades ni se contabilizan en muchos casos los test realizados en casa. Esta importante subida de casos de momento no es preocupante en los hospitales donde, aunque hay más ingresos, la situación de momento no es grave.
Concretamente, hay 6 858 personas ingresadas en los hospitales, una tasa del 5,5%. De ellos, 362 están en la UCI, lo que supone una ocupación del 4%. También se han notificado 234 fallecimientos esta semana. El aumento de casos ha hecho que la incidencia pase de 555 a 813 por cada 100 000 habitantes en mayores de 60 años, que es la que se mide. La semana pasada las farmacias vendieron más de dos millones y medio de test de antígenos. ¿Estamos entonces al principio de una séptima ola?
"Estamos teniendo suficiente grado de severidad para que nos preocupe y frenar los contagios", apunta Daniel López Acuña, epidemiólogo y exdirector de Crisis de la Organización Mundial de la Salud (OMS); mientras que Quique Bassat, epidemiólogo de ISGlobal, señala que "me resisto a utilizar la terminología de ola, porque tiene connotaciones negativas que nos retrotraen a olas precedentes".
Además, la incidencia a siete días ha bajado a la mitad, 391. En este sentido, indica Alfredo Corell, catedrático de Inmunologia de la Universidad de Valladolid: "Podemos estar ya en el final de la subida por lo tanto bajando ya de esta olita, de este diente de sierra”.
Otro indicador, la presión hospitalaria, ha subido unas décimas. “No es extrapreocupante porque los ingresos en UCI siguen estando en torno al 4 por ciento, no han visto incrementado su incidencia”, comenta Corell. Solo en Castilla y León y Asturias está por encima del 10 por ciento.
La pregunta es si hemos dejado medidas como la mascarilla en interiores demasiado pronto. "Siempre he señalado que fue una medida prematura”, apunta Acuña. Por su parte, Bassat cree que “era el momento de eliminar las restricciones y flexibilizar”. Corell considera que “quizás yo las hubiera estirado un poquito más en el tiempo, pero había que tomarlas”.
En cuanto a si habría que volver a ellas, Corell cree que “solo un cambio sustancial en las tendencias actuales de ingresos hospitalarios e ingresos en UCI deberían hacernos reflexionar y hacernos cambiar la estrategia”.
Algunos expertos piden ya ese cambio. Acuña, por ejemplo, insta a "aislar a positivos asintomáticos, hacer más pruebas diagnósticas”. Mientras que otros como Jorge Parra, médico y subdirector del hospital HLA Granada creen que “la tendencia debería ser la de continuar en esta gripalización de la infección" para recuperar la normalidad.