¿La vacuna contra la COVID-19 para niños es diferente de la que se administra a los adultos? Muchos padres se preguntan cómo es la vacuna pediátrica, fabricada por Pfizer BioNTech, que comenzará a administrarse a niños de entre cinco y 11 años en España.vacuna pediátrica,niños de entre cinco y 11 años en España.
La vacuna contra el COVID-19 que se administrará a los niños es la misma que está aprobada para adultos. Es importante recibir la segunda vacuna, ya que la pauta vacunal completa permitirá dar la máxima cobertura ante el coronavirus.
La vacuna contra la COVID-19 de Pfizer para niños de 5 a 11 años de edad es la misma vacuna que está aprobada para adolescentes y adultos, pero se administra en una dosis menor. Esta dosis menor se debe al desarrollo del sistema inmunitario de un niño; y no está basada en el tamaño o el peso del niño.
Los dos pinchazos se pondrán con un intervalo de ocho semanas y no cada 21 días, que es la recomendación de la Agencia Europea del Medicamento. La Comisión a propuesta de los expertos de la Ponencia de Vacunas han acordado que con ocho semanas se contribuye a incrementar la respuesta inmune y a tener vacunados a todos los menores entre 5 y 11 años en un corto espacio de tiempo con al menos una dosis.
La propuesta "se fundamenta en la evidencia desarrollada en un país como Reino Unido, que ha implementado esta pauta" en adolescentes, y también en la logística, porque este intervalo "no se traduciría en una dificultad para seguir el proceso de vacunación" en aquellas comunidades que opten por vacunar a sus menores en los centros educativos, según ha explicado a Efe el presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV), Amós García Rojas.
Esta nueva pauta ha "sorprendido un poco" al pediatra y epidemiólogo del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), Quique Bassat, quien ha recordado que desde el principio se habló de una separación entre dosis de 21 días, que fue lo recomendado por la EMA.
La vacuna contra la COVID-19 es segura y eficaz en los niños y es la seguridad la principal prioridad para el antídoto, y la aprobación por parte de las diferentes agencias médicas de Europa y EEUU se basa en resultados seguros.
“Estas vacunas son muy bien toleradas, y hasta el momento se han administrado millones de dosis de manera segura”, aseguran los expertos. Estados Unidos e Israel han sido los primeros países en vacunar a menores de 12 años, y su experiencia ha sido fundamental para aprobar la vacuna.
EEUU realizó un estudio de vacunas en el que participaron más de 4.600 niños entre 5 y 11 años. De este grupo, alrededor de 3.100 recibieron la vacuna Pfizer-BioNTech COVID-19. Los otros niños recibieron una inyección inactiva (placebo). Los niños que recibieron la vacuna fueron monitorizados para detectar efectos secundarios durante al menos dos meses después de recibir la segunda dosis. Los efectos secundarios fueron generalmente de leves a moderados.
La FDA también analizó los casos de COVID-19 que ocurrieron una semana después de que los niños recibieran la segunda dosis de la vacuna. Ninguno de los niños en este análisis había sido diagnosticado previamente por COVID-19. De los 1.305 niños que recibieron la vacuna, se detectaron tres casos positivos de COVID-19. Entre los 663 niños que recibieron el placebo, hubo 16 casos de COVID-19. Los resultados sugieren que la vacuna tiene aproximadamente un 91% de efectividad en la prevención de COVID-19 en este grupo de edad.