Sanidad finalmente optó por adoptar la postura de la prudencia extrema tras cuatro días de intensos debates entre los técnicos de la Administración central y de las comunidades autónomas. Los técnicos del Comité de Salud Pública del Sistema Nacional de Salud han decidido finalmente vetar el uso de la vacuna de AstraZeneca a los mayores de 55 años, pero también a los menores de 18.
Los expertos han tomado esta decisión en consonancia con buena parte de los países europeos, por la falta de ensayos clínicos por parte del laboratorio entre las personas más mayores y los menores edad habida cuenta la premura por sacar al mercado su profilaxis.
La decisión de no inocular el compuesto diseñado por la Universidad de Oxford a las personas que ya superan los 55 años, cambia contrarreloj sus planes de vacunación, ya que tenía previsto usar buena parte de los 1,8 millones de viales que AstraZeneca empezará a entregar este fin de semana para inmunizar a partir de marzo a los mayores de 70 años. Gran Bretaña sí la está usando, no obstante, lo que podría provocar que en un período de tiempo su efectividad en estos grupos de edad ahora vetado sea comprobada.
La Comisión de Salud Pública, en la que están representadas todas las Comunidades Autónomas había decidido ayer que las primeras dosis de la vacuna de AstraZeneca y la Universidad de Oxford que lleguen a España irían destinadas a profesionales sanitarios y sociosanitarios que no son de primera línea.
Según los últimos estudios realizados por la compañía, la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford y la farmacéutica AstraZeneca es efectiva frente a esta variante. Concretamente, los investigadores que la han desarrollado sostienen que, comparativamente, tiene una eficacia similar a la observada con la original del coronavirus; aquella con la que fue testada. e acuerdo al profesor de infección pediátrica e inmunidad e investigador jefe de los ensayos de la vacuna de Oxford, Andrew Pollard, los datos de las pruebas "indican que la vacuna no solo protege contra el virus original de la pandemia sino también contra la variante británica, la B117, que ocasionó el repunte de la enfermedad desde finales de 2020 por todo el Reino Unido".
Así, aseguran que la vacuna puede responder perfectamente y generar inmunidad en aquellas personas que la han recibido. Además, según el estudio, que aún no ha sido publicado oficialmente, la vacuna de Oxford-AstraZeneca resulta también en la reducción de la carga viral, que se podría traducir, dicen, en una bajada de la transmisión de la enfermedad.