Los temporeros de Huesca afectados por los brotes de coronavirus serán alojados en instalaciones acondicionadas por el Ejército
El alcalde de Albalate de Cinca ha pedido ayuda al Gobierno para que mande al Ejército
El Ejército de Tierra acudirá este jueves al municipio oscense de Albalate de Cinca para ayudar en las labores de contención de la COVID-19 y estudiar la instalación de infraestructuras para albergar a las personas que hayan dado positivo.
Así lo ha confirmado la delegada del Gobierno en Aragón, Pilar Alegría, tras una reunión conjunta con la consejera de Sanidad, Sira Repollés, y el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, para planificar el combate del coronavirus en toda la comunidad.
“Seguramente ya mañana por la mañana el Ejército de Tierra vaya al municipio a hacer una revisión de la zona y, a partir de ahí, a valorar qué instalación sería necesaria para poder realizar la acogida de los pacientes con COVID”, ha explicado Alegría a los medios, tras el encuentro.
Le decisión se ha tomado después de que esta mañana el presidente de la comarca del Cinca Medio, José Ángel Solans, y el alcalde de Albalate, Ricardo Chárlez, enviaran una carta al Gobierno para solicitar la intervención de las Fuerzas Armadas en el municipio.
La consejera de Sanidad, Sira Repollés, ha calificado como “preocupante” la situación sanitaria en Albalate de Cinca, aunque ha asegurado que el brote se encuentra “controlado”, ya que no se están detectando nuevos casos.
“Al tratarse de localidades pequeñas, que pueden tener más dificultad para el control de los confinamientos o de los casos de alojamientos de los temporeros, siempre se ha ofrecido la colaboración tanto del Gobierno Central, Guardia Civil e Interior”, ha agregado.
La titular de Sanidad no ha querido adelantar el número de contagiados que se ha detectado el municipio oscense, unas cifras que se presentarán a lo largo de la tarde en el balance diario de casos de COVID-19 en la comunidad autónoma.
Preocupación por los brotes en el campo
Gobierno y comunidades han coincidido este miércoles en la necesidad de mantener la campaña de la fruta porque es una actividad "esencial", pero sin generar o agravar un problema de salud pública asociado al coronavirus, que achacan más a las condiciones de vida o de transporte de los temporeros que a su trabajo.
Es a la conclusión que han llegado los ministros de Sanidad, Salvador Illa, y de Agricultura, Luis Planas, con las once autonomías en las que la actividad agrícola y hortofrutícola supone un importante movimiento de temporeros a lo largo del año: Cataluña, País Vasco, Andalucía, La Rioja, Murcia, Comunidad Valenciana, Aragón, Castilla La Mancha, Navarra, Extremadura y Castilla y León.
Lo han hecho en una reunión que han convocado para abordar la situación del personal dedicado a las tareas de recolección hortofrutícola de temporada ante la pandemia, un colectivo vulnerable que ha sufrido brotes en varias localidades de Lleida o Huesca.
Y es que los casos detectados ayer en estas dos comunidades han elevado el número de contagios de coronavirus detectados España a un nuevo máximo desde el fin del estado de alarma y el comienzo de la nueva normalidad: el Ministerio de Sanidad ha informado hoy de 390 positivos, 127 más que ayer, de los que 160 han sido diagnosticados en Aragón y 91 en Cataluña.
De los más de 120 focos que están activos en la actualidad, los más preocupantes siguen siendo los que atenazan la comarca leridana del Segrià, donde ya han fallecido cuatro personas desde que se decretara su cierre perimetral el pasado 4 de julio.
Lleida registra en la actualidad una cincuentena de brotes y agrupaciones de casos (personas positivas sin relación entre ellas) de COVID-19, la mayoría de ellos en esta comarca del Segrià; la velocidad de contagio es muy elevada, por lo que las autoridades no descartan en las próximas horas, y debido a la cantidad de pruebas PCR que se realizan, que estas cifras "aumenten".
Con el objetivo de atender toda esta presión asistencial se va a contratar una cincuentena de profesionales que ayudarán a reforzar tanto el equipo sanitario como el administrativo del Segrià, donde esta tarde han entrado en vigor nuevas restricciones en seis de sus municipios y en Lleida capital.
Fuera de allí, el Ayuntamiento de Barcelona ha ofrecido al Govern entre 40 y 50 rastreadores para hacer un seguimiento de los contactos de positivos en la ciudad, pero por el momento el Departamento de Salud no ve la necesidad a pesar de que la capital catalana suma 29 pequeños brotes.
Paralelamente, el detectado hace unos días en un asentamiento ilegal de temporeros en Albalate de Cinca, -municipio ubicado en la comarca oscense del Cinca Medio y que ayer fue una de las que retrocedió a una fase 2 "flexibilizada"-, afecta ya a más de una veintena de estos trabajadores sobre un total aproximado de treinta.
Allí está previsto que mañana el Ejército de Tierra acuda para ayudar en las labores de contención y estudiar la instalación de infraestructuras para albergar a las personas que hayan dado positivo, tal y como habían pedido las autoridades comarcales.
También a la industria hortofrutícola afecta el brote de coronavirus de Murcia vinculado con un vuelo procedente de Bolivia, que concentra ya 65 casos, de los que 18 están localizados en una de estas empresas radicada en El Raal (Murcia) y 14 son contactos de estos trabajadores.
Otro de los focos importantes de los últimos días ha sido el de A Mariña (Lugo), pero allí las infecciones han bajado a 151; a partir de mañana, se levantarán las restricciones de movimiento en toda la comarca a excepción de Burela, donde se concentra el 77 % de los positivos, un total de 116.
Dichas restricciones estarán en vigor durante cinco días a partir de las 00.00 horas de este jueves, y también se mantendrán las limitaciones en aforos y del horario de apertura de cafeterías, bares y restaurantes hasta las 00.00 horas, así como la obligatoriedad de usar la mascarilla.
Esta medida también se aplicará a partir de esta medianoche en el País Vasco, autonomía que ha iniciado el cribado para controlar un posible foco en Getaria, que ha arrojado por el momento 4 positivos y que tiene su origen en el caso importado de otra comunidad de una trabajadora de un bar muy popular en la localidad costera guipuzcoana.
Tras varios días desde que comunicó un tercer brote en su región, hoy la Comunidad de Madrid ha dado a conocer un nuevo brote con cinco casos positivos originado en una cena celebrada entre 8 personas en un domicilio de la capital el 4 de julio.
Madrid ha notificado al Ministerio que este brote tiene 61 contactos identificados -en colaboración con las comunidades autónomas de Galicia, Castilla y León, País Vasco, Cataluña y Andalucía-, ya que 3 de los positivos y 2 de los contactos de la cena volvieron a sus lugares de origen viajando en dos trenes, un vuelo nacional y vehículos particulares.
Todas las comunidades autónomas afectadas están informadas y tienen la relación de los contactos para que hagan el seguimiento.
Andalucía también suma un nuevo brote que eleva el total a catorce, con 147 contagiados -80 menos que ayer- en las provincias de Jaén, Granada, Málaga, Córdoba y Almería.
Tres están controlados: en el distrito de Granada, con 37 casos, en el metropolitano de Granada, con ocho casos, y en la Serranía de Málaga, con un solo caso en un centro residencial, mientras que los otros once se encuentran en fase de investigación.
Illa insistió ayer en la importancia de tener cuidado durante las reuniones porque son el origen del 45 % de los 123 brotes de coronavirus activos, como el declarado hace dos días en Valladolid, con 22 afectados de entre dos y 55 años, en su mayoría familiares.
Por último, en Socuéllamos (Ciudad real) son 30 los casos con prueba PCR positiva en el brote desatado la pasada semana.
De momento, las competencias para atajar todos estos brotes son de las comunidades, y el Ministerio de Sanidad solo actuará cuando los focos afecten a dos o más comunidades declarando la actuación coordinada, un paso previo al estado de alarma que deberá someter y ser aprobado en el pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
Es lo que estipula el "Plan de respuesta temprana en un escenario de control de la pandemia por COVID-19", que recoge un conjunto de medidas para la preparación de nuestro país ante los distintos escenarios que pueda dibujar el coronavirus diseñadas por el departamento que dirige Salvador Illa, y que mañana se someterá al pleno del Interterritorial una vez las comunidades han hecho sus aportaciones