Se acerca la temporada de gripe: los expertos temen que pueda resurgir con más fuerza tras el coronavirus

  • Las medidas frente al virus han dejado a un lado las temporadas de gripe

  • Las hospitalizaciones por gripe podrían aumentar en un 20% esta temporada

  • Los expertos temen que la gripe pueda resurgir con más fuerza

La gripe o influenza (por su denominación en inglés) es una enfermedad infecciosa respiratoria producida por un virus que se transmite con facilidad, propagándose rápidamente especialmente en las épocas de otoño e invierno, y que provoca directa o indirectamente hasta 650.000 muertes al año a nivel mundial.

Diversos estudios han analizado qué pasará en la siguiente temporada de gripe después de haber vivido la pandemia de coronavirus. Muchos científicos temen que ahora pueda resurgir con más fuerza, después de un año en el que se ha mantenido controlada por las medidas del coronavirus.

Un estudio de la Universidad de Pittsburgh señala que las hospitalizaciones por gripe llegarán a aumentar en un 20% esta temporada si se mantienen los niveles de vacunación del pasado año.

Además, señala que si se diera otra temporada con niveles bajos de gripe debido a las medidas frente al virus, tras ello el 48% de la población sería susceptible a la infección con el fin de la inmunidad natural.

Los epidemiólogos quieren ser los "interlocutores lógicos" con el Gobierno

Los epidemiólogos reivindican ser escuchados por el Gobierno, ser los "interlocutores lógicos" antes de que se adopten decisiones políticas y piden mecanismos institucionales, como la creación inmediata de una agencia española de salud pública, con liderazgo científico y capacidad ejecutiva.

Así lo ha expresado el catedrático de Bioestadística y Epidemiología en la Escuela de Salud Pública de Harvard, Miguel Hernán, en la conferencia inaugural del congreso de la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), en la Universidad de León, donde también ha abogado por hacer más accesibles a los investigadores las bases de datos, "que existen y están encerradas en silos", y se enlacen mejor entre comunidades y el Ministerio de Sanidad.

Hernán ha considerado un asunto de "seguridad nacional" que haya bases de datos poblacionales disponibles para su uso inmediato ante una emergencia sanitaria.

"Sin esas bases de datos cómo se pueden tomar decisiones basadas en la evidencia", se ha preguntado.

Bajo el nombre "Evidencias en pandemias", el Congreso de la SEE, reunía hasta el viernes, a la Asociación Portuguesa de Epidemiología y a la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS) y cuenta con la participación de 650 científicos.

Y es de los primeros congresos presenciales en España en pandemia con un número tan relevante de asistentes,

En su discurso inaugural, Hernán ha insistido en que los epidemiólogos son los únicos expertos entrenado para "analizar e interpretar" los datos de salud, los únicos que pueden construir puentes con el Gobierno ante una pandemia y, por ende, el "interlocutor lógico".

Hernán ha subrayado que muchas decisiones de salud pública no se tomaron hasta que la pandemia estaba totalmente "descontrolada" y ha recordado que al inicio de la epidemia, en marzo de 2020, los retrasos en los diagnósticos covid oscilaban entre los 10 a 14 días.

Y además de los retrasos en las notificaciones, el rastreo de contactos no estaba listo para una avalancha.

También ha señalado que antes de la pandemia había 10 camas UCI por 100.000 habitantes, que se ocupaban en torno al 70 %. Esto cambió radicalmente en pandemia.

Que los hospitales públicos llegaron a multiplicar por tres el número de camas UCI fue, según Hernán, "algo épico" aunque hubiera hecho falta que se multiplicaran por cinco.