Sexualidad, depresión e infertilidad: los tabúes de los hombres al hablar de su salud
La ‘Encuesta Merck: Hombres, Cáncer y Tabúes’ deja claro que aún queda mucho por avanzar en la percepción de la salud de los hombres
Un 67% acude al médico en solitario y solo un 22% lo hace acompañado de su pareja
Los hombres se someten a menos controles preventivos
Más de la mitad de los hombres españoles considera que la salud masculina continúa siendo un tema tabú en la sociedad, una percepción ligeramente mayor para aquellos con una edad comprendida entre los 30 y 44 años. De hecho, 8 de cada 10 cree necesario realizar más campañas de concienciación al respecto. Estas son algunas de las conclusiones que se derivan de la ‘Encuesta Merck: Hombres, Cáncer y Tabúes’, impulsada por la compañía de ciencia y tecnología Merck con el apoyo técnico de GAD3 y en la que han participado 1.600 españoles de entre 18 y 70 años.
“Esto refleja lo que habitualmente ocurre en nuestra práctica profesional. Es bastante frecuente encontrarnos situaciones clínicas caracterizadas por un silencio en el caso de los hombres, porque todavía arrastramos una serie de comportamientos tradicionales dentro de los que están la invulnerabilidad y la fortaleza con la que el hombre se tiene que mostrar con los demás”, explica el Dr. Javier Puente, oncólogo médico del Hospital Clínico Universitario San Carlos de Madrid y director del Instituto de Oncología del mismo centro.
MÁS
Los resultados revelan que la salud en general es un tema ‘muy presente’ en su día a día solo para el 24% de ellos -frente a un 32% de las mujeres-. Cuando se trata de conversar sobre miedos o temores acerca de su estado de salud, la mayoría de los hombres lo hacen ‘mucho o bastante’ con sus parejas (54%), pero solo 2 de cada 10 con su entorno laboral, ámbito en el que se muestran más reacios.
“Es sorprendente, pero seguimos teniendo la percepción de que existen tabúes en torno a los temas de salud que afectan a los hombres. Afortunadamente, nuestra sociedad cada vez está más informada sobre las cuestiones que impactan en su bienestar. Los resultados muestran, por ejemplo, que el 57% de los españoles asegura tener mucha información sobre el cáncer y los avances científicos que se han producido en su abordaje, como la inmunoterapia, ya conocida por casi la mitad de la población de nuestro país”, señala Montse Jansà, directora de la unidad de Oncología de Merck en España.
“Sin embargo, la Encuesta Merck refleja la necesidad de poner el foco en aquellos tumores con menos visibilidad como el cáncer de vejiga o de cabeza y cuello, del que 8 de cada 10 hombres admiten saber ‘poco o nada’. Los más conocidos por ellos: pulmón, próstata y colorrectal”, añade.
Preocupaciones en torno al cáncer
En el momento del diagnóstico, sorprende que ellos señalan ‘las secuelas físicas de la enfermedad’ como principal preocupación (49%); mientras que para un 71% de las mujeres es ‘superarla’. Aunque el estado psicológico es la menor inquietud en el momento de la detección, más de la mitad de los españoles con cáncer ha acudido a un profesional de la salud mental durante la enfermedad. Este porcentaje asciende al 53% en los hombres (especialmente los menores de 44 años), siendo superior en 6 puntos con respecto a ellas (47%).
“Con frecuencia se muestran fuertes y no hablan de sus sentimientos ante el diagnóstico. Tienden a minimizar los síntomas y a no quejarse delante de los profesionales. En general, no comparten sus preocupaciones o necesidades y, en muchas ocasiones, vinculan la enfermedad con la imagen de virilidad”, comenta el Dr. Puente.
Por otro lado, 8 de cada 10 españoles informaría de su dolencia a su familia y amigos, más en el caso de los hombres que las mujeres (86% versus 81%). De los varones que no lo compartirían, el 57% señala como principal razón ‘no querer preocupar a sus seres queridos’, a lo que le sigue un 28% que solo ‘lo haría si el tratamiento funcionase’.
Menos cómodos al hablar de salud sexual, depresión e infertilidad
En el ámbito laboral ocurre lo mismo, 3 de cada 4 hombres lo diría en sus compañías, pero de entre los que prefieren no hacerlo, el 48% justifica que ‘se trata de un tema personal’ y, además, manifiesta más miedo que ellas a perder su puesto de trabajo o, incluso, a no promocionar si lo cuentan.
Dispuestos a hablar de las distintas enfermedades, los hombres se sienten menos cómodos en lo que se refiere a la salud sexual, depresión e infertilidad, seguidas de tipos de cáncer como el de riñón, vejiga o próstata. “Los tumores urológicos constituyen el grupo de neoplasias más frecuentes en el varón y su tratamiento puede afectar a la esfera funcional y sexual”, argumenta el experto.
Ellos se realizan menos pruebas diagnósticas
A pesar de que 7 de cada 10 hombres se preocupan ‘mucho o bastante’ por el cuidado de su salud, se someten a menos controles preventivos para la detección temprana de enfermedades que las mujeres: ellos un 43% y ellas un 61%. El porcentaje de hombres que no se somete a estos controles es especialmente importante en los menores de 30 años (63%). Entre estas pruebas, destacan las relativas a enfermedades cardiovasculares (52%) y las de cáncer colorrectal (43%), el segundo tumor más diagnosticado en España tanto en hombres como en mujeres. Le siguen a mucha distancia las de detección del cáncer de vejiga (el 17% ellos, cifra muy alejada del 5% de mujeres que se someten a estas).
Solo el 17% de los hombres acude a su médico en cuanto detecta algún síntoma
El informe muestra que casi la mitad de los españoles espera a que los síntomas sean persistentes antes de asistir al médico, algo común en ambos sexos. También revela que solo un 17% de los hombres acude al médico en cuanto detecta algún síntoma. Cabe destacar que ellos tienen una menor disposición a acudir a consulta en comparación con las mujeres ante todos los síntomas analizados.
En cuanto a la visita médica, la Encuesta Merck muestra que un 67% acude en solitario y solo un 22% lo hace acompañado de su pareja (situación más común en la franja de edad de 45 a 70 años). Si le dan a elegir entre doctor y doctora, los más jóvenes son los que muestran más reparos: el 28% de ellos prefiere que le atienda un doctor y hasta un 40% de ellas optaría por doctora. Con la edad, les resulta más indiferente a ambos sexos.