La cistitis es una de las dolencias más extendidas entre las mujeres y puede convertirse en una auténtica pesadilla para quienes la experimentan con frecuencia. Necesidad frecuente de orinar, sensación de no haber podido vaciar la vejiga, dolor o ardor, presión o calambre en el abdomen... Los síntomas son muy fácilmente reconocibles y afortunadamente existen medicamentos y trucos para aliviar sus síntomas y eliminar la infección de orina. ¿Qué remedios caseros existen contra la cistitis? ¿Qué trucos preventivos conviene aplicar para reducir la probabilidad de sufrirla?
Consejos para prevenir la cistitis
La cistitis se define como una inflamación en la vejiga o las vías urinarias provocada por una infección, normalmente de origen bacteriano. Es más frecuente en las mujeres debido a la cercanía entre uretra y ano y la presencia de gérmenes en esta última zona. Tal y como recuerda Mayo Clinic, tras las infecciones respiratorias, se trata del siguiente tipo de infección más frecuente en atención primaria. Normalmente es necesario un análisis de orina para identificarla y, si existe infección, el médico recetará antibióticos para eliminarla, siempre que la infección sea de origen bacteriano. Normalmente en un día comenzarán a mejorar los síntomas.
Con todo, también existen remedios caseros que ayudan a eliminar la cistitis y a aliviar sus síntomas. Por ejemplo, se ha comprobado que existen ciertos alimentos que ayudan a completar el efecto de los antibióticos y ayudar a prevenir futuras infecciones, como es el caso de los arándanos rojos, la gayumba o la salvia. También los probióticos y la vitamina C resultan de gran utilidad. Aunque existen medicamentos que incluyen estos nutrientes, lo mejor es consumirlos de forma natural a través de la alimentación.
Otro remedio clave (y también una buena técnica preventiva) es beber agua con frecuencia para ayudar a nuestro cuerpo a eliminar deshechos de forma eficiente. Además, la hidratación permite que la orina se diluya y viaje más rápido por nuestro organismo, de forma que las bacterias lo tengan más difícil para llegar a los órganos urinarios. Del mismo modo, no aguantar las ganas de orinar es muy importante: ir al baño con frecuencia permite que las bacterias pasen menos tiempo en nuestro organismo.
Además de beber agua, consumir zumo de arándanos es un hábito que ha demostrado una gran eficacia a la hora de prevenir la cistitis y eliminar sus efectos con mayor rapidez, ya que contiene compuestos que pueden evitar que las células de E. coli se adhieran a las células del tracto urinario. Además, el zumo de arándano contiene antioxidantes como los polifenoles, que tienen propiedades antibacterianas y antiinflamatorias.
La higiene íntima es otro punto clave a la hora de prevenir la aparición de infecciones de orina: la limpieza debe realizarse siempre desde delante hacia detrás para evitar que las bacterias del recto accedan a la uretra. También es conveniente practicar una buena higiene sexual: orinar después del sexo, usar anticonceptivos de barrera y lavar los genitales disminuye en gran medida el riesgo de padecer una infección de este tipo.