"Cientos de miles de pacientes" podrán beneficiarse en Reino Unido del nuevo y "revolucionario" tratamiento que, mediante dos inyecciones al año, ayuda a controlar los niveles de colesterol. Según anunció el Servicio Nacional de Salud británico (NHS) el pasado 1 de septiembre, se ha llegado a un acuerdo con la farmacéutica Novartis para el uso de inclisiran en la atención primaria.
Un acuerdo que, apuntó el NHS, "permitirá que 300.000 pacientes con colesterol alto y antecedentes de enfermedad cardiovascular se beneficien del fármaco durante los próximos tres años". Tras ese periodo, señalan, la cifra podría llegar a ascender hasta las 30.000 "vidas salvadas" durante la próxima década.
Es una buena noticia para Reino Unido, donde aproximadamente dos de cada cinco personas presentan niveles de colesterol alto, lo que les sitúa en una situación de vulnerabilidad y aumenta las posibilidades de sufrir enfermedades cardíacas. "La enfermedad cardíaca sigue siendo una de las principales enfermedades mortales, por lo que es fantástico que ahora tengamos un tratamiento tan eficaz y conveniente para quienes viven con niveles de colesterol peligrosamente altos", celebró la directora ejecutiva del NHS, Amanda Pritchard.
La colaboración del NHS y Novartis pasa a la fase de implementación después de la recomendación final positiva del Instituto Nacional de Salud y Excelencia Clínica (NICE).
"Este enfoque de gestión sanitaria de la población es potencialmente revolucionario, ya que busca mejorar la salud de un país identificando de manera proactiva a las personas 'de mayor riesgo' e introduciendo soluciones efectivas que mejorarán su futuro estado de salud. Esto representa un avance significativo en la atención al paciente a través del manejo efectivo de los lípidos", ha comentado el profesor Kausik Ray, MD, profesor de Salud Pública en el Imperial College de Londres y consultor cardiólogo honorario en el Imperial College NHS Trust.
"Como médico, observo a muchos pacientes en los que sus niveles de colesterol no están suficientemente controlados para su nivel de riesgo, incluso pese al uso óptimo de las terapias disponibles, lo que los sitúa en un riesgo superior de sufrir un infarto o ictus. Tener un acceso más rápido y amplio a un medicamento como inclisiran, que ofrece un práctico programa de dosificación de mantenimiento dos veces al año, así como la capacidad de usarse en la atención primaria, donde se atiende a la mayoría de los pacientes, y proporcionar reducciones sostenidas de c-LDL, es un hito enormemente positivo en la atención al paciente", ha señalado.
Novartis trabajará con el NHS Accelerated Access Collaborative y la Academic Health Science Network (con el apoyo de NHS Digital) para ayudarles a identificar, tratar y monitorizar proactivamente a las personas elegibles con ECVA que hayan experimentado un evento cardiovascular, como un infarto o un ictus, y tienen el colesterol alto a pesar del tratamiento con estatinas con la dosis máxima tolerada.
"La enfermedad cardiovascular ha sido durante mucho tiempo la causa número uno de mortalidad humana, y este problema de salud requiere reimaginar cómo tratamos y abordamos la salud del corazón", ha comentado Vas Narasimhan, CEO de Novartis.
"Esta colaboración pionera con el NHS en Inglaterra tiene el potencial de impulsar una mejora radical en la salud cardiovascular en el Reino Unido, y demuestra el compromiso de Novartis de trabajar con los sistemas sanitarios de todo el mundo para mejorar los resultados de los pacientes mediante la creación conjunta de nuevas soluciones de acceso para medicamentos innovadores", ha añadido.