A partir de mañana, lunes 4 de mayo, las peluquerías vuelven a abrir sus puertas. Eso sí, respetando todas las medidas de seguridad. Si quieres acudir a la peluquería deberás hacerlo con mascarilla y con cita concertada previamente. Las agendas se han quedado sin huecos y las revistas ya no podrán entretenernos mientras esperamos nuestro turno.
Aparte de estas, tendrán que cumplirse muchas otras medidas, como el uso de toallas desechables, la distancia de seguridad de dos metros entre personas, el lavado frecuente de manos, el uso de guantes o la introducción de las pertenencias de los clientes en bolsas herméticas individuales.
El sector de las peluquerías se incorpora a la primera fase de la desescalada de la actividad comercial con los protocolos higiénico-sanitarios que obligatoriamente por ley debe de aplicar en sus establecimientos. El presidente de Marco Aldany y portavos de la Alianza de Empresarios de Peluquería de España, Alejandro Fernández, ha explicado que se establecerán turnos para los peluqueros, que éstos desempeñarçan su trabajo con mascarillas y guantes, y que se tomará la temperatura a los clientes con termómetros láser.
Otras peluquerías como Llongueras, Jean Louis David, Franck Provost y The Barber Company, del grupo Provalliance abrirán sus puertas también el 4 de mayo y, con el fin de asegurar la protección de sus empleados y de sus clientes, han preparado un protocolo higiénico-sanitario "muy exhaustivo y totalmente fiable".
Por su parte, las asociaciones mayoritarias de fabricantes de productos profesionales de peluquería y principales representantes de los salones de peluquería en España, han trasladado al Gobierno que no pueden garantizar la apertura de todos los salones este lunes, ya que es posible que precisen de algunos días para extremar su preparación y priorizar en la seguridad de los ciudadanos.
Por otro lado, la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (Stanpa) junto a otras organizaciones han elaborado una 'Guía de Recomendaciones' de referencia básica de cara a la recuperación de la actividad de las peluquerías.
Dicha guía recomienda que todas las áreas deben estar señalizadas y se respetará la distancia mínima a través de marcas en el suelo o barreras, además se restringirá el número de clientes dependientes del tamaño del salón y la imposición de la flexibilidad horaria para dar servicio a la población de forma escalonada y, garantizar así, las normas de seguridad.
El material de protección desechable individual se ubicará en contenedores específicos y se eliminarán los dispensadores de agua en sustitución por botellas de agua individuales o vasos de un solo uso. Se sustituirán toallas habituales por toallas desechables y en el cobro del servicio se fomentará el uso de medios electrónicos.
La guía apunta además a que las zonas de juego infantil deben quedar clausuradas, mientras que el número de clientes debe guiarse por el tamaño del salón y las condiciones del local. Si no se puede mantener la distancia mínima, se debe reducir el número de personas atendidas al mismo tiempo.