La quinta ola de los jóvenes ha dado paso a un nuevo concepto de expansión del virus: los hipercontagiadores. El término ha empezado a ser utilizado por las autoridades de Castila y León que han alertado del papel de estos sujetos en la expansión de la variante Delta del SARS-CoV-2, mucho más contagiosa.
Para los expertos, los hipercontagiadores que recorren varios bares para terminar reunidos en plazas y con multitud de contactos, lo que hace que el virus se expanda y dificulta el rastreo.
Prueba de ello es que, en esta comunidad autónoma, la mayor parte de los casos se dan en el grupo de edad de 12 a 19 años y de 20 a 29, aunque se observa un incremento en los grupos de hasta 49 años y en los menores de 12.
Las autoridades han alertado de la elevada velocidad de contagio en esta quinta ola que está mucho más vinculada a la población joven que las anteriores llegando a multiplicar por veinte las incidencias acumuladas entre semanas.
Para evitar esta expansión fuera de control, las comunidades autónomas están pidiendo autorización a los Tribunales Superiores de Justicia para recuperar restricciones como el toque de queda, los confinamientos perimetrales o las restricciones horarias y de servicios en hostelería y ocio.
Las medidas buscan restringir lo máximo posible la celebración de fiestas en parques y playas, los botellones masivos en zonas urbanas y obligar a recuperar el uso de mascarillas en estos encuentros en los que no se puede garantizar la distancia mínima de seguridad.
La alerta también ha sido lanzada desde el Ministerio de Sanidad. Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias ha reconocido que las "aglomeraciones masivas sin distancia y sin mascarillas. Compartiendo bebidas, en situaciones de exaltación de la amistad" pueden ser la causa más probable de este incremento de contagios que estaría provocada por los jóvenes y su incapacidad de evitar los botellones en la calle.