Las autoridades sanitarias aumentan los esfuerzos en la vacunación contra la covid con el objetivo de que la mayor parte de la población cumpla la pauta completa con la tercera dosis. Todo esto mientras los contagios siguen fuera de control, a pesar de que se registran los primeros signos de ralentización de la sexta ola.
La Comisión de Salud Pública, formada por el Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas, acordó el pasado 13 de enero extender la tercera dosis de la vacuna frente al coronavirus a toda la población mayor de 18 años.
Esta tercera dosis de refuerzo se había aprobado previamente, el pasado 16 de diciembre de 2021, a personas de entre 40 y 59 años. Para la dosis adicional se administran vacunas de tipo ARN mensajero de Pfizer o Moderna. Según la evidencia, la combinación de vacunas es segura e incluso puede contribuir a una mejor respuesta inmunitaria.
La nueva estrategia Plan de Vacunación también contempla un nuevo cambio: se establece ahora en un plazo de cinco meses el tiempo que debe transcurrir entre la administración de la segunda y la tercera dosis de la vacuna, en lugar de los seis meses vigentes hasta ahora. En este caso, involucra a todos aquellos que recibieron el pasado verano la segunda dosis de Pfizer o Moderna.
En el caso de las personas vacunadas con dosis de AstraZeneca o Janssen, la tercera dosis será también de ARN mensajero y se aplicará una vez hayan transcurrido al menos tres meses de haber recibido el último pinchazo. Esta reducción en el tiempo de espera entre vacunas (segunda y tercera dosis) se debe a que la eficacia de la segunda dosis disminuye a partir de las 10 semanas ante la nueva variante de la covid, ómicron, según apuntan varios estudios.
La dosis de refuerzo tiene como función mejorar el sistema inmunológico a nivel de anticuerpos y de células B y T, que ya están presentes en el organismo tras la administración de las dos primeras dosis. Un vacunado con tres dosis puede todavía infectarse, incluso presentar empeoramiento, pero los síntomas suelen ser leves.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha defendido este jueves la eficacia de la tercera dosis esgrimiendo un estudio del Instituto Carlos III que concluye que esta -tercera- dosis de recuerdo aumenta los anticuerpos neutralizantes 20 veces más a personas mayores de 65 años, y que también funciona frente a la variantes delta y ómicron con un incremento de neutralizantes 17 veces mayor.
"Da igual cuál sea la letra del alfabeto griego de las variantes; la vacuna es lo que funciona", ha insistido durante una comparecencia. En este sentido también ha recordado que aquellas personas de entre 60 y 69 años vacunadas tienen 16 veces menos posibilidades de hospitalización, 29 veces menos de terminar en la UCI y 20 veces menos de fallecimiento.
Según precisó en Informativos Telecinco el doctor José Antonio Navarro Alonso, miembro de la Asociación Española de Vacunología: "Hasta la fecha se ha comprobado que, después de una tercera dosis de una vacuna de ARN mensajero, las vacunas protegen muy bien frente a enfermedad grave, hospitalizaciones y fallecimientos".
La sexta ola de contagios, que ha disparado los contagios por todo el territorio, despierta las dudas con la administración de la tercera dosis entre infectados. Según detalló Sanidad, las personas de menos de 65 años que hayan dado positivo por covid con dos dosis, pueden recibir la vacuna de recuerdo si han pasado cuatro semanas tras la infección, y siempre que hayan pasado cinco meses desde la aplicación de la segunda dosis con Pfizer/BioNTech o Moderna o tres meses si fue con Janssen o AstraZeneca.
"Si se ha pasado la enfermedad, tienen que pasar por lo menos cuatro semanas para que se pueda poner la tercera dosis. Antes se pensaba en seis meses desde que se había padecido la enfermedad. Ahora se ha acortado: si se tiene la infección, a las cuatro semanas ya se puede administrar la vacuna", detalló en este medio el doctor Lorenzo Armenteros, portavoz de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) sobre el coronavirus.
Muchos se preguntan si tiene sentido ponerse la vacuna tras la infección. "Las recomendaciones actuales se basan en que la respuesta inmune después de una infección no siempre produce respuestas inmunes sólidas y robustas. Además, se desconoce su duración", señaló al respecto el doctor Navarro Alonso.
El objetivo de las autoridades sanitarias en España es vacunar a la población mayor de 12 años que todavía no ha recibido ninguna dosis o no tiene la pauta completa. El Ministerio de Sanidad ha recomendado asimismo una cuarta dosis a los cinco meses del útimo pinchazo para pacientes de riesgo.
Algunos pacientes de cáncer, trasplantados, en diálisis, hemodiálisis, mayores de 40 años con síndrome de Down o que se le administran fármacos inmunosupresores. Esta población tendrá cuarta dosis debido a que su sistema inmunitario, al estar debilitado, no alcanza el nivel de protección adecuado.
Para la población general, los expertos no creen por ahora que vaya a haber una cuarta dosis y no apuestan por una vacunación indefinida con el modelo actual. No obstante, se apoyan en la evidencia y algunos apuestan por soluciones como las vacunas esterilizantes para frentar la transmisión de la covid, ya que las vacunas actuales aprobadas no frenan la transmisión, solo detienen la progresión de la enfermedad.