La nieve que cubre todavía las calles de Madrid ha dificultado las tareas de limpieza durante más de una semana. La acumulación de basuras solo empeora por días y, aunque en los próximos días el hielo se irá fundiendo, lo cierto es que el agua resultante preocupa más de lo que tranquiliza. Algunos municipios podrían no estar preparados para el rápido deshielo y se teme que puedan florecer plagas.
Con las alcantarillas bloqueadas por nieve y ramas de árboles y miles de imbornales sellados, el riesgo de inundaciones es alto en la capital. Desde la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla) se está alertando del alto riesgo de proliferación de plagas.
“Si no se actúa rápido, la acumulación de residuos y el deshielo de la nieve pueden generar una situación de alto riesgo para la salud pública, al propiciar la proliferación de ratas, cucarachas, y otras plagas urbanas con capacidad para transmitir enfermedades vectoriales como la salmonelosis, la disentería, leptospirosis, el E. Coli y otras muchas”, advierte la directora general de Anecpla, Milagros Fernández de Lezeta.
“Es imprescindible que acotemos este problema y entre todos actuamos frente a él. Necesitamos que desde los gobiernos se vuelquen todos los esfuerzos y recursos posibles en despejar las zonas públicas de basuras y residuos en el menor tiempo posible. Mientras tanto, también hacemos un llamamiento a la población para que, en la medida de lo posible, generen el menor número de desperdicios que puedan y saquen sus basuras con menor asiduidad hasta que los servicios se vean totalmente reestablecidos”, aconseja.
Por ahora, la UME se habría retirado de la Comunidad de Madrid tras bajar la capital a nivel 1 de alerta del Plan de Inclemencias Invernales. Las áreas afectadas por Filomena acaban de ser nombradas zona catastrófica en el Consejo de Ministros del martes.