La variante ómicron del covid-19, descubierta recientemente en Sudáfrica, está despertando todo tipo de alarmas por poseer más de 50 mutaciones en su genoma, respecto a la secuencia original de Wuhan. Tantas mutaciones, según los expertos, podría sugerir una mayor transmisibilidad y la posibilidad de un contagio masivo y rápido.
Aunque aún se desconoce cómo se comportará esta variante del virus, el temor de las farmacéuticas a que las vacunas ya no sean efectivas ha hecho que Moderna y Pfizer ya hayan anunciado que están preparadas para comenzar la fabricación de una nueva versión de la vacuna si fuera necesario. Tanto es así que Pfizer ha dicho que tendría lista una versión actualizada en tan solo 100 días si ómicron fuese resistente a la versión actual.
Del mismo modo, Johnson & Johnson ha lanzado un comunicado para informar de que también pretende probar la efectividad de su vacuna durante los próximos días.
Tal y como ha informado la compañía en un comunicado, Pfizer tomo medidas hace meses para poder adaptar su vacuna rápidamente a las exigencias del virus. "Pfizer y BioNTech tomaron medidas hace meses para poder adaptar la vacuna de ARNm en seis semanas y enviar los lotes iniciales en 100 días en caso de una variante de escape".
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha etiquetado a ómicron como una 'variante de preocupación', una distinción que se otorga a las variantes del Covid-19 más amenazadoras. Las autoridades sanitarias todavía no saben si las vacunas actuales pueden proteger a la población de la variante, por lo que empresas como Pfizer y Modernas están atentas al desarrollo del virus.
Pfizer y su socio alemán BioNTech emitieron un comunicado en que explicaron que sus laboratorios ya están analizando esta variante para determinar si su vacuna (una de las más usadas en EE.UU. y en países europeos) podría necesitar algún tipo de "ajuste". Por su parte, Moderna ha alertado de que las mutaciones observadas en la variante son "preocupantes" y ha explicado que probará varias dosis de refuerzo de su vacuna para ver cuál es la reacción.
A pesar de que hace tan solo unos días que las autoridades descubrieron esta variante en Sudáfrica, ya se han detectado varios casos en España, Israel, Reino Unido o Bélgica, entre otros países. Esta situación ha obligado a los gobiernos de la UE a imponer restricciones de movimiento con Sudáfrica y otros países colindantes dentro del continente africano.
Ómicron ya está presente en los cinco continentes. Desde la OMS hablan de un riesgo de transmisión global muy alto. Aunque se desconoce si es más transmisible, si sustituirá a otras variantes, si es más virulenta o provocará enfermedad más grave, si es más peligrosa en niños pequeños, ni si las vacunas actuales pueden frenarla.