Lavar y desinfectar las frutas las verduras es una recomendación que, desde organismos como la Agencia de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), lleva años haciéndose para eliminar posibles microorganismos patógenos y elementos químicos que en ocasiones pueden contaminar estos alimentos.

A pesar de que no es una pauta novedosa, la situación actual que vivimos por la crisis del coronavirus con respecto al proceso adecuado para hacerlo se hayan intensificado.

Llevar una mala higiene en la cocina puede acarrear malestares gástricos, dolores abdominales, reacciones en la piel o enfermedades como la listeriosis. Pasar las frutas y verduras por debajo del chorro de agua no es suficiente. Por todo ello, es importante conocer la manera correcta de lavar y desinfectar las frutas y verduras.

En la piel de la fruta se encuentra la mayor parte e la fibra de la pieza. Por eso, los expertos recomiendan lavar la pieza de fruta y comerla con su piel para no perder de esta manera el rico aporte de nutrientes para nuestro organismo. Además, esta gran cantidad de fruta contribuye a prevenir el cáncer de colón, según los últimos estudios.

Un claro ejemplo es el de la manzana. Al pelar esta fruta se puede llegar a perder hasta el 11% de la fibra que contiene. En el caso de las peras, la cantidad de fibra que se pierde si se pela es el 34%.

Otra de las recomendaciones para mejorar nuestra salud es consumir los zumos que hagamos caseros en casa con pulpa. No es recomendable retirar los trozos de pulpa que hayan quedado ya que contienen muchas vitaminas que son beneficiosas para nuestra salud.

Por su parte, los frutos que haya que retirar la piel para poder comerlo como en el plátano o en los cítricos como la naranja o el limón no es necesario hacer una limpieza exhaustiva. Es decir, los expertos recomiendan consumirlo una vez retirada la cantidad de cáscara o piel justa.

Lo primero que debemos hacer a la hora de manipular alimentos es lavarse bien las manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos. También será importante utilizar menaje limpio y trabajar sobre superficies igualmente limpias y desinfectadas.

Para vegetales de hoja verde como la lechuga, se aconseja dividirla en hojas y sumergirlas en agua para ablandar la tierra que se haya podido quedar adherida y eliminar pesticidas y restos de fertilizantes. Después de esto, deben secarse con papel de cocina absorbente para eliminar el exceso de humedad.

Para frutas o verduras de consistencia firme bastaría con lavarlos con abundante agua, frotarlos con un cepillo para eliminar la suciedad y secarlos bien. Esto es válido también para alimentos como las patatas aunque vayan a pelarse, pues así se evita que la contaminación pase del cuchillo al alimento.

No obstante, para desinfectar bien los alimentos, se recomienda diluir lejía apta para alimentos en agua, sumergir los alimentos en la mezcla el tiempo que marque el producto y secarlo con papel absorbente.

Por lo general, las pautas serían: 4,5 mililitros de lejía apta para alimentos en 3 litros de agua durante cinco minutos y aclarar bien después.

Pelar la fruta y enjuagarla antes de comerlas, así como cocer las verduras y carne son algunos de los consejos aportados por Ferrer Consumer Health en su campaña. Además, destaca la importancia de tomar los alimentos en estado óptimo, conservarlos en frío sino se consumen de inmediato, asegurar una correcta higiene de la persona que va a manipular los comestibles, lavarse las manos ante de comer y evitar compartir cubiertos y vasos.

Ahora bien, la compañía ha reconocido que la prevención no es infalible y el riesgo existe, por lo que ha aconsejado tomar algún medicamento, como por ejemplo un antidiarreico, si se padece diarrea.

Y es que, aunque los antidiarreicos son medicamentos que se adquieren sin receta, Ferrer ha aconsejado que se consulte con el farmacéutico para saber que producto se ajusta mejor a las necesidades de cada persona.