Ahora somos más conscientes de que lavarnos las manos o desinfectar nuestro hogar es fundamental para prevenir el coronavirus, pero no se nos pueden pasar por alto una serie de 'puntos calientes' que pueden ser focos de transmisión y con los que entramos en contacto a diario.
Baño y cocina son los lugares de la casa que más desinfectamos por ser las zonas más frecuentadas de la vivienda donde convergen materia orgánica, humedad y olores. Pero además, existen seis puntos del hogar que deberíamos desinfectar con más frecuencia y que, a veces, olvidamos en nuestras rutinas de higiene habituales.
Entendemos como 'puntos calientes' aquellos que están expuestos a mayor contacto de las manos de distintas personas. Es el caso de:
Para la desinfección de estos puntos, se necesitan productos específicos para combatir los virus. Estos productos ya están regulados por el Ministerio de Sanidad y se ha publicado un listado de virucidasautorizados a este efecto.
Para pomos, grifos, encimeras e interruptores, son correctos aquellos limpiadores desinfectantes multiusos, aptos para cualquier tipo de superficie, que también podemos encontrar en formato toallitas.
En cambio, para limpiar y desinfectar nuestra zona de trabajo y los dispositivos electrónicos, se recomienda utilizar trapos o paños de microfibra (ya que los estropajos podrían rayar las superficies) y productos no abrasivos y sin lejía.
Antes de limpiar, hay que apagar y desenchufar los dispositivos, sacar pilas o baterías y esperar a que se enfríen. Hay que evitar que los líquidos entren en contacto con las aperturas, como la de los auriculares, cargador o USB.
En un centímetro cuadrado de nuestro smartphone puede haber unos cuatro mil microorganismos, lo que lo convierte en la mayor concentración de bacterias en nuestro medio ambiente, según un estudio de la Universidad Metropolitana de Manchester.
Se recomienda desinfectarlo a diario con un trapo humedecido y un limpiador desinfectante. Nunca pulverizar directamente sobre el dispositivo. Para la cámara, lo ideal es un trapo de microfibra para lentes, y para la funda basta con una toallita multiusos desinfectante o agua y jabón.
En el ordenador se debe limpiar y desinfectar aquellas zonas que se tocan con mayor frecuencia, por varias personas. Para el teclado, pasar el trapo humedecido o bien una toallita desinfectante. Para la pantalla, un trapo seco con un producto neutro. Para dispositivos USB y cargadores, un paño húmedo con desinfectante, sin tocar la parte metálica.
Para los auriculares lo mejor es un paño de microfibra con desinfectante y para quitar la suciedad acumulada en las las rejillas, utilizar un cepillo de dientes.
En cuanto a la zona de trabajo, podemos limpiar el escritorio con un trapo húmedo y un producto desinfectante pulverizando directamente sobre a una distancia de 20cm y repartiendo con el trapo.
Para desinfectar la silla, si es de piel, podemos usar el paño con el producto desinfectante. Si es de tejido, mejor optar por agua y jabón o un desinfectante específico, con especial atención a las zonas donde se reposan los brazos.