Un nuevo sistema permitirá desinfectar mascarillas con radiación infrarroja y luz ultravioleta. Lo ha desarrollado una empresa catalana que ya ha comenzado a probarlo con éxito en mascarillas FFP2 y FFP3, las que ofrecen el nivel más alto de protección contra la COVID-19.
El centro tecnológico Eurecat, en Cataluña, ya ha realizado las pruebas del sistema desarollado por E. Vila Projects, de Sant Fruitós de Bages a partir de dos tecnologías para la desinfección: primero con radiaciones infrarrojas, que calientan la mascarilla, y luego la somete a luz ultravioleta.
Las pruebas del nuevo método de desinfección se han realizado con éxito contaminando las mascarillas por varias partes con bacterias Escericchia Coli, más resistente a este tratamiento que el SARS-CoV-2 . Tras la aplicación de las radiaciones y la luz ultravioleta se ha medido la cantidad de microorganismo viable remanente en los diferentes puntos contaminados.
Las pruebas de la efectividad del sistema ha incluido controles positivos y negativos, con mascarillas que se han contaminado y no se han desinfectado y mascarillas que no se han contaminado, para reforzar la validez de los resultados.
E. Vila Projects, que ha patentado el sistema de desinfección, ha informado que cada uno de sus equipos tiene una capacidad de tratamiento de 5.000 mascarillas al mes.