Un fármaco oral dirigido contra las deficiencias del sistema inmunitario debido a la edad protege de la muerte por coronavirus a ratones envejecidos, según un estudio publicado en 'Nature'. Está liderado por la Universidad de Iowa (Estados Unidos) y cuenta con la participación del equipo español dirigido por Luis Enjuanes, en el Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC).
El 90 % de los ratones que recibieron dosis diarias del fármaco, denominado BGE-175 (asapripant), sobrevivió a la infección con una dosis letal de SARS-CoV-. Todos los roedores no tratados del grupo de control murieron.
El fármaco se dirige contra la inflamación asociada al envejecimiento inmunitario en lugar de contra virus. Por este motivo, los investigadores creen que puede tener potencial para su uso en el tratamiento de otras infecciones, que perjudican más a las personas mayores. La función del sistema inmunológico disminuye con la edad, tanto en humanos como en animales. De esta manera, los más vulnerables ante la covid-19 son los mayores de 65 años.
El medicamento estudiado revierte múltiples aspectos del envejecimiento inmunológico y previene eficazmente la muerte en ratones. Sin embargo, estos son los resultados de la fase preclínica. Todavía queda por reafirmarlos en la fase II en humanos que se está llevando a cabo en Argentina, Brasil y Estados Unidos. Para su aprobación tendría que completar las fases II y III, así como recibir el visto bueno de la Agencia Europa del Medicamento. Se está estudiando si podría ayudar a los pacientes mayores a combatir otros virus.
El modelo de ratón reflejaba la progresión de la covid-19 humana. La cepa de coronavirus, adaptada a los animales, provocó una enfermedad que compartía muchos de los rasgos distintivos con la que afecta a las personas: acumulación de líquido en los sacos aéreos de los pulmones y altos niveles de factores proinflamatorios, denominados citocinas.
El laboratorio Bioage Labs, productor del medicamento, ha asegurado en un comunicado que podría ser efectivo contra variantes emergentes en el futuro. La explicación, según sus palabras, es que se dirige al sistema inmunitario y no al virus.
El equipo español, encabezado por Enjuanes, ha contribuido a la investigación con una herramienta propia, el cDNA infectivo. Es un clon infectivo que permite convertir el genoma del virus en ADN para poder manipularlo en laboratorio, ha explicado la viróloga Isabel Sola, también firmante del estudio.
El articulo pretende demostrar que "hay más posibilidades" de estudiar los mecanismos por los que el virus causa daño, identificar las posibles causas y buscar medicamentos más específicos, agrega la viróloga.
La gravedad de la covid-19 "está, en buena parte, en la inflamación exagerada que causa y el estudio muestra que dentro de todos los mediadores de inflamación que pueden estar alterados hay unos en particular que aumentan con la edad, lo que ha permitido identificar fármacos más específicos para ampliar el arsenal terapéutico".
El fármaco actúa inhibiendo la proteína PGD2 DP1, que el equipo ha identificado como una diana clave para el envejecimiento inmunitario. A través de esta vía, el medicamento potencia las células dendríticas que ayudan al organismo a identificar los agentes patógenos. También disminuye la infiltración de neutrófilos, que conduce a una inflamación perjudicial, y así se combate la disminución de la inmunidad en personas mayores.