La inmunidad al coronavirus tras el contagio puede durar décadas o incluso toda la vida
Un estudio publicado en Nature sugiere que las células inmunes de la médula ósea podrían producir anticuerpos ante el covid durante décadas
Las células inmunes permanecen en la médula ósea preparadas para generar anticuerpos
"La inmunidad por infección y por vacunación parece ser de larga duración”
Dos nuevos estudios publicados en revistas científicas revelan que la inmunidad frente al coronavirus durar décadas. Uno de ellos apunta incluso que la inmunidad, tras superar la enfermedad de forma leve podría durar toda la vida. Estos estudios alejan la posibilidad de tener que vacunarnos contra el covid cada año, como sucede con otros coronavirus como el de la gripe.
Uno de los estudios publicados en la revista 'Nature' sugiere que las células inmunes de la médula ósea podrían producir anticuerpos frente al coronavirus durante décadas aportando una inmunidad a las personas que ya estuvieron contagiadas.
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Los dos informes analizaron a personas que habían estado expuestas al coronavirus aproximadamente un año antes. Las células que conservan una memoria del virus persisten en la médula ósea y pueden producir anticuerpos cuando sea necesario, según uno de los estudios, publicado en la revista Nature. Este estudio sugiere que quienes han pasado la covid de forma leve pueden conservar esas células inmunes, que bombardearán de anticuerpos al virus, durante toda la vida.
“El otoño pasado, hubo informes de que los anticuerpos disminuyen rápidamente después de la infección con el virus que causa el Covid-19, y los principales medios de comunicación interpretaron que eso significaba que la inmunidad no era duradera", ha señalado el autor principal Ali Ellebedy, profesor asociado de patología e inmunología, de la medicina y de la microbiología molecular.
"Pero esa es una mala interpretación de los datos. Es normal que los niveles de anticuerpos bajen después de una infección aguda, pero no bajan a cero; se estabilizan. Aquí, encontramos células productoras de anticuerpos en personas 11 meses después de los primeros síntomas. Estas células vivirán y producirán anticuerpos por el resto de la vida de las personas. Esa es una fuerte evidencia de una inmunidad duradera", ha añadido.
Las personas que se infectaron y nunca tuvieron síntomas también pueden quedar con inmunidad duradera, especulan los investigadores. Pero aún no se ha estudiado si aquellos que sufrieron una infección más grave estarían protegidos contra un futuro brote de enfermedad.
El segundo estudio, publicado en la revista de biología BioRxiv encontró que las llamadas células B de memoria continúan madurando y fortaleciéndose durante al menos un año después de la infección.
Hay un “creciente número de documentos que sugieren que la inmunidad provocada por la infección y la vacunación contra el SARS-CoV-2 parece ser de larga duración”, ha explicado a Infobae Scott Hensley, inmunólogo de la Universidad de Pensilvania.
El coronavirus no muta como la gripe
Estos estudios pueden calmar los temores de que la inmunidad sea temporal como pasa con los coronavirus de la gripe, que mutan cada año. “La razón por la que nos infectamos con coronavirus comunes repetidamente a lo largo de la vida podría tener mucho más que ver con la variación de estos virus que con la inmunidad”, señala Hensley.
Las células B de memoria producidas en respuesta a la infección con SARS-CoV-2 y mejoradas con la vacunación son tan potentes que frustran incluso las variantes del virus, lo que anula la necesidad de vacunas de refuerzos, explica Michel Nussenzweig, inmunólogo de la Universidad Rockefeller en Nueva York, director del estudio sobre la maduración de la memoria.
Las pautas de recuerdo para las personas que nunca se han contagiado
“Las personas que se infectaron y se vacunaron realmente tienen una respuesta excelente, un conjunto excelente de anticuerpos, porque continúan desarrollando sus anticuerpos”, explica el doctor de Nueva York. Los expertos si dejan la puerta abierta a la necesidad de vacunas de refuerzo para las personas que no han pasado la enfermedad de la covid.
Eso significa que las personas que no han tenido covid y han sido inmunizadas pueden eventualmente necesitar una vacuna de refuerzo. Nussenzweig: “Ese tipo de cosas las sabremos muy, muy pronto”.
El equipo de Nussenzweig observó cómo evolucionaban las células B de memoria con el tiempo. Analizaron sangre de 63 personas que se habían recuperado de covid un año antes. La gran mayoría de los participantes presentaron síntomas leves y 26 también habían recibido al menos una dosis de las vacunas Moderna o Pfizer.
Los anticuerpos neutralizantes, necesarios para prevenir la reinfección del virus, permanecieron sin cambios entre seis y 12 meses, mientras que los anticuerpos relacionados pero menos importantes desaparecieron lentamente, según la investigación.
A medida que las células B de memoria continuaron evolucionando, los anticuerpos que produjeron desarrollaron la capacidad de neutralizar un grupo aún más amplio de variantes.
Un año después de la infección, la actividad neutralizante en los participantes que no habían sido vacunados fue menor contra todas las formas del virus, con la mayor pérdida observada contra la variante identificada por primera vez en Sudáfrica.
Con estos datos, los científicos sostienen que la vacunación amplifica notablemente los niveles de anticuerpos.