Equipos de seguridad de la Universidad de Mánchester, en el Reino Unido, han tenido que intervenir para poner fin a una fiesta organizada entre estudiantes universitarios a la que solo podían asistir "covid positivos". La iniciativa ha escandalizado a todo el país y ha disparado la preocupación en esta ciudad en la que los casos de contagios están disparados, según informa RT.
Las autoridades sanitarias británicas están especialmente preocupadas por la situación de Mánchester donde en la semana previa al 2 de octubre se registraron casi 3.000 nuevos casos alcanzándose una tasa de incidencia en estos siete días de más de 529 casos por 100.000 habitantes.
La preocupación es mayor entre la comunidad universitaria dónde solo el pasado 4 de octubre se registraron 1.41 nuevos contagios entre estudiantes y personal administrativo y docente.
Las residencias de estudiantes son focos de la pandemia y muchos universitarios han denuncia la situación de estos centros en los que hay gran cantidad de aislados.
Los responsables de la Universidad de Mánchester han criticado ya estas celebraciones solo para personas contagiadas y han denunciado los "comportamientos y conductas irresponsables" de quienes las convocan y participan.
Según denuncia The Guardian, la tasa de contagios en el grupo de edad entre 17 y 21 años es seis veces mayor que en el resto de la ciudad. Este medio asegura también que los organizadores de estas fiestas creen que la convocatoria buscaba una celebración en un entorno de "salud y seguridad".
Pero el caso de Mánchester no es el único, desde la vuelta de los universitarios a los claustros las tasas de contagio se han disparados en sus centros. El mantenimiento de la docencia presencial estarían colaborando en esta rápida e intensa expansión de la enfermedad.
Pero el avance de la pandemia está cambiando esta realidad ya que, a medida que aumentan los casos, se suspenden las clase y los alumnos quedan recluidos en sus residencias, ayudando como focos de contagio y transmisión de la enfermedad.