El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha comparecido para hacer balance de la pandemia del coronavirus en España, que este lunes deja 40 nuevos casos diagnosticados con fecha del día previo y 218 con fecha de inicio de síntomas en los últimos 7 días.
Además, en lo que se refiere a la cifra de muertes provocadas por la COVID-19, con fecha de defunción en los últimos 7 días se han contabilizado 25 muertes, mientras que el número total de decesos permanece congelado a la espera de que las comunidades autónomas revisen, corrijan y actualicen los datos para consolidar la serie y aportar “datos más sólidos”, según ha explicado en ocasiones anteriores el epidemiólogo.
En este sentido, Fernando Simón ha destacado que España mantiene una “evolución muy buena” en la epidemia y ha asegurado que, además, la cifra de muertos va a seguir descendiendo, puesto que así lo indica la situación de los hospitales al haber pasado de “unos 500 pacientes en UCI la semana pasada a 352”; una dato sumamente significativo, dado que, ha enfatizado, esto supone que los pacientes más críticos, los que pueden tener complicaciones más graves, o incluso fatales, están descendiendo.
Por otro lado, tras ensalzar la capacidad de detección de España y todos los esfuerzos que están realizando las distintas comunidades autónomas para actuar de forma precoz, el epidemiólogo ha subrayado que “todo indica que vamos por la buena senda y ahora podemos dejar de pensar que tenemos transmisión comunitaria expandida”. Ello permite, ha dicho, pasar a centrarse en “los brotes” y la “respuesta específica sobre estos”.
En este sentido, ha precisado que “en el último mes se han detectado algunos brotes”, pero han sido correctamente localizados e identificados: “Se han detectado 3 brotes en Andalucía, muy pequeñitos; 3 en Aragón; 1 en Asturias asociado a un instituto gerontológico; un brote en Islas Baleares a principios de mayo que ya está solucionado; algunos asociados a mataderos en Castilla-La Mancha; en Cataluña también ha habido en mataderos…”, ha enumerado, citando algunos ejemplos.
Asegurando la eficiencia en la respuesta que se está produciendo en las distintas regiones ante el surgimiento de nuevos casos o focos, Simón ha insistido: “Somos capaces de identificar brotes específicos que nos permiten ir cerrando poco a poco la transmisión comunitaria, lo que permite centrarnos en brotes específicos. La evolución es buena”.
Por otro lado, y una vez finalizado su análisis, Simón ha dado paso a la tradicional ronda de cuestiones de los periodistas, que le han preguntado, entre otras cosas, sobre si existe una especie de ‘madrileñofobia’, tras haberse convertido en tendencia en las redes sociales este término ante el miedo de algunas personas a la llegada de madrileños a sus comunidades con la llegada de la libre movilidad entre provincias que se producirá a partir del próximo 21 de junio, una vez finalice el estado de alarma.
En este sentido, el epidemiólogo ha salido en defensa de la Comunidad de Madrid sin olvidarse de la necesidad de extremar la precaución en la capital de España por sus especiales características: “Yo creo que ahora mismo Madrid ha hecho un esfuerzo enorme por controlar la epidemia al igual que han hecho todas las comunidades autónomas. Madrid y Barcelona, por sus características, son zonas de mucho más riesgo de transmisión en España. Esto pasa. No solo porque haya una densidad de población enorme, y no solo porque en Madrid haya una gran movilidad de personas mucho mayor, donde además sus medios de transporte comunitarios son mucho más masivos… Todo esto pone a Madrid en situación complicada. Pero a su vez es un nodo de comunicaciones. En Madrid no solo pasa lo que le pasa a los madrileños, sino también lo que les pasa a los viajeros que pasan por Madrid. Tenemos que ser sensatos. No hay que tener esa ‘madrileñofobia’. Sí que es cierto que hay que tener cuidado. Madrid durante unas semanas y un par de meses fue la zona donde más transmisión ha habido. Siguen teniendo algo más de casos, pero sus tasas, el número de casos por población y la capacidad de control que tienen es muy buena. Están incluso mejor que algunas. Desde este punto de vista no hay que tener ningún miedo. Pero en Madrid hay que tener más que cuidado que en ningún otro sitio ante algún repunte. Cualquier introducción del virus hay que tomársela más en serio que en otras zonas que puedan ser más rurales”, ha contestado, destacando que “Madrid está muy similar al resto de las comunidades de España”, en lo que atañe a la situación de respuesta epidemiológica.