Estados Unidos ha superado este miércoles la barrera de los 150.000 fallecidos por coronavirus, según datos recogidos por la Universidad Johns Hopkins, que ha cifrado además en cerca de 4,4 millones el total de contagios en el país desde el inicio de la pandemia.
La universidad ha señalado que hasta la fecha han sido confirmados 4.396.030 en el país norteamericano, con 150.034 fallecidos, al tiempo que ha agregado que 1.355.363 personas han superado la COVID-19, la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus.
En estos momentos, el estado con más casos en el país norteamericano es California, con 473.785, seguido por Florida, con 451.413; Nueva York, con 413.593; y Texas, con 410.039. Sin embargo, Nueva York sigue siendo el estado con más fallecidos, con 32.658, más del doble que Nueva Jersey, que figura en segundo lugar con 15.798.
Por su parte, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) recogen en su página web los últimos datos actualizados el miércoles, cuando había 4.339.997 casos y 148.866 víctimas mortales.
El organismo apuntó en su último balance que en las 24 horas anteriores se habían confirmado 59.862 nuevos contagios y 1.194 fallecidos, en medio de un importante incremento de los casos, especialmente en los estados del sur y el suroeste del país.
En este contexto, el principal responsable científico en la lucha contra el coronavirus en Estados Unidos, Anthony Fauci, ha alertado de que el repunte de casos que experimenta el sur y el suroeste de la nación norteamericana se está desplazando hacia los estados del Medio Oeste americano.
En una entrevista concedida a la MSNBC, ha precisado que, en Florida, Texas, Arizona y California, un aumento en el porcentaje de pruebas de coronavirus que daban positivo señaló un resurgimiento posterior.
"Estamos empezando a ver eso en algunos de esos estados ahora, Kentucky, Tennessee, Ohio, Indiana y otros", ha explicado. Por ello, ha trasladado que, "inevitablemente", los estados que "aún no tienen problemas, probablemente los tendrán".
Así, ha aconsejado que los estados que experimentan repuntes deben revisar sus procesos de reapertura, enfatizando la necesidad de adherirse a una desescalada gradual y por fases.
"No todos los estados hicieron eso e, incluso, en algunos de los estados que lo hicieron, algunas de las personas no escucharon cuáles eran las sugerencias", ha lamentado.
"Entonces, con lo que estamos lidiando ahora es que queremos asegurarnos de que, a medida, que comencemos a ver estos aumentos repentinos, es posible que se deba retroceder un poco", ha insistido Fauci, aunque ha descartado la idea de un cierre completo.
"Creo que psicológicamente sería muy difícil de aceptar, pero lo que podemos hacer es (...) cerrar lo suficiente como para recuperar el equilibrio, de modo que luego se proceda a abrir de una manera mucho más cautelosa", ha explicado.