El Gobierno de Madrid prepara la reapertura de las discotecas. Podrán trabajar como restaurantes, con limitaciones de aforo y horario. Todo lo contrario ha ocurrido en Cataluña, donde la Generalitat ha dado marcha atrás. El ocio nocturno seguirá cerrado para enfado del sector.
La protesta de los empresarios y trabajadores del ocio nocturno de Cataluña continúa tras la marcha atrás del Govern de permitir su reapertura. La decisión de la administración regional viene tras detectar un incremento del riesgo de rebrote del virus y por el temor a nuevas subidas en la incidencia de casos.
"No somos fuente del rebrote, llevamos mucho cerrados, desde marzo que llevamos así", asegura el dueño de un local.
Aseguran que con su apertura se evitarían las fiestas ilegales y los botellones. "No conocen la noche, es peor el botellón", se defienden. En juego 3.700 empresas y 37.000 trabajadores. "Que nos hagan un rescate", dice otro empresario indignado.
Diferente es la situación en Madrid. El vicepresidente Ignacio Aguado ha anunciado que a partir del día 15 se permitirá a las discotecas abrir como restaurantes: "Puedan tener una licencia mixta y puedan empezar también a ofrecer servicios de restauración de forma temporal".
Permiso "que ahora puede ser un salvavidas" para las discotecas, salas de baile y bares de copas que llevan cerrados en la comunidad desde agosto. La consejería de Interior tendrá ahora que determinar los requisitos que deben cumplir los locales.