La fundación diabetes cero tiene claro su objetivo: acabar con la diabetes 1 que trastorna como pocas la vida de muchas familias. Solo en España se estima que son más de 600.000 personas afectadas por esta enfermedad de los cuales 30.000 son niños menores de 15 años. Dentro de una pandemia que ya afecta a 132.600 nuevos casos cada año en todo el mundo.
En España, alrededor de unos 6 millones de personas padecen esta enfermedad, sumando los diferentes tipos (1, 2 y gestacional), de los cuales 5,3 millones son pacientes con diabetes mellitus tipo 2, la que está asociada a la obesidad, según datos del 'Estudio di@bet.es'. Cada año se diagnostican más de 386.000 nuevos casos. En el mundo, estas cifras se elevan a 422 millones de adultos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), que estima que en 2030 la diabetes será la séptima causa de muerte en el mundo.
La Fundación DiabetesCERO actualmente cofinancia 3 proyectos de investigación que tienen como objetivo curar la diabetes tipo 1 cuyos pacientes deben inyectarse insulina de por vida. Pero para ello necesitan recursos y ya se sabe que en España, la investigación no es la reina de los debates.
David Perna-Barrull, investiga para acabar con la enfermedad. No en vano, él mismo tiene diabetes tipo 1 y su queja es un clamor que tiene que llegar a una sociedad ciega: "Hay falta de personal, tanto investigadores como técnicos, éste es uno de los recurso más importante en cualquier investigación”.
La presidenta de la Fundación DiabetesCERO, Isabel Mérida, pide que la lucha contra la enfermedad se convierta en toda una marea. "La sociedad también puede investigar, ayudando a los científicos a conseguir los recursos necesarios para avanzar.
La Fundación (Dt0) mantiene una carrera contrarreloj. En tan sólo 6 años después de haber comenzado su andadura han conseguido invertir más de 220.000€ en investigación para la cura de la diabetes tipo 1. Actualmente cuenta ya con 17 delegaciones en toda España. “La diabetes tipo 1 es un enfermedad curable, pero solo lograremos erradicarla si creemos en nuestros científicos, apoyamos sus proyectos y conseguimos entre todos que puedan investigar con el personal necesario y la tecnología adecuada", reconocen.
De los más de 7.000 medicamentos en desarrollo en el mundo, 475 son para los distintos tipos de diabetes, según ha apuntado la patronal de la industria farmacéutica en España (Farmaindustria), con motivo del Día Mundial de la patología, que se celebra este jueves 14 de noviembre.
España ocupa un lugar destacado en esta patología si se tiene en cuenta que en los últimos cuatro años se supera el centenar de ensayos clínicos en diabetes, según el registro de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad.
La industria resalta que, hacia 1980, la producción de la insulina humanizada a partir de una técnica recombinante "revolucionó" el tratamiento de la diabetes, que se reimpulsó posteriormente con la segunda generación, los denominados análogos de insulina humana, que presentan características farmacocinéticas que permiten mejorar el perfil de utilización de las insulinas convencionales. Existen varios tipos de análogos de insulina humana, que pueden ser de acción lenta, intermedia, rápida y prolongada.
Además de los distintos tipos de insulinas, se han desarrollado nuevas formas de liberación de la insulina, como las plumas precargadas, las bombas de infusión o la insulina inhalada. "Estos avances han facilitado su utilización, aumentado la satisfacción de los pacientes y elevado las tasas de cumplimiento del tratamiento, que se traduce en una menor morbilidad y mortalidad y en una reducción de la tasa de hospitalización y de visitas médicas, lo que repercute a su vez en el coste económico para el sistema sanitario, como refleja un estudio realizado por la Fundación Weber", argumentan.
Además de las insulinas, existen distintos tipos de medicamentos antidiabéticos no insulínicos que han permitido ampliar el arsenal terapéutico disponible. Entre los más recientes, destacan los inhibidores de la dipeptidil peptidasa-4 y los inhibidores del SGLT2, que han demostrado no solo controlar la glucosa en sangre, sino también reducir el riesgo de accidente cerebrovascular en subgrupos de pacientes con diabetes tipo 2.
"Pero la investigación no se detiene y en el futuro se divisan soluciones encaminadas a mejorar tanto el diagnóstico como la efectividad, incluso la prevención. Así, la industria farmacéutica, junto a otros grupos de investigación, están centrando sus esfuerzos en hallar indicadores de predicción fiables para la diabetes tipo 1, medicamentos más eficaces con un manejo más sencillo para el paciente, sustitutos de la insulina administrados por vías alternativas o fórmulas para proteger las células beta del páncreas e, incluso, sustituir las células dañadas", concluyen.