En tan solo una semana, la incidencia acumulada de casos de coronavirus ha bajado exponencialmente en Sudáfrica, de 25.000 a 15.000 contagios. Un descenso causado por la variante ómicron. Y no, no es una contradicción. Expertos como el Director del Centro de Enfermedades Transmisibles Emergentes, Juan José Badiola, lo saben y explican que esta va a ser una "experiencia fugaz, porque cuanto más rápido se propaga un virus, más rápidamente desaparece".
España, en medio de la sexta ola de coronavirus y con los mayores datos de contagios desde el inicio de la pandemia, va varias semanas por detrás. Se enfrenta al reto de frenar a ómicron en plenas Navidades, una fecha que, sin duda, no acompaña.
La situación hospitalaria es estable y con ómicron se presentan otros síntomas: "es más una sintomatología parecida a la de la gripe, de congestión", explica Germán Peces-Barba, neumólogo de la Fundación Jiménez Díaz.
Los vacunados que se contagien tendrán fuertes anticuerpos
La mejor aliada es la vacuna. Los inmunizados que además pasen ómicron tendrán fuertes anticuerpos. Buenas noticias, pero nada de relajación. Badiola recuerda que "cuanto más se multiplica el virus, más fácil es que aparezcan nuevas variantes".
A la vacunación se suma la cautela. Ambos son la mejor estrategia para luchar contra esta nueva variante del coronavirus.