Un grupo de expertos de la Universidad de Stanford ha sido el encargado de llevar a cabo la investigación. Para ello se han basado en el comportamiento del virus en el condado de Santa Clara, en California, a lo largo de los días 3 y 4 de abril. Pudieron observar que el número real de contagiados era superior al registrado oficialmente. Esto supondría una importante reducción del porcentaje de infectados fallecidos.
Ante el dato ofrecido por la Organización Mundial de la Salud, que afirmaba que la mortalidad por COVID-19 era de entre el 1 y el 3 por ciento, la medida que se adoptó, prácticamente a nivel global, fue el confinamiento. No obstante, este equipo viene a demostrar que los porcentajes son tales dado que no se conocen todos los casos reales de infectados. No hay que olvidar la falta de pruebas, las restricciones para hacerse los test y los casos asintomáticos.
El condado de Santa Clara tiene un total de dos millones de habitantes. El equipo pudo observar que la cifra de ciudadanos contagiados ascendía a los 1.000 casos registrados oficialmente. Con su investigación descubrieron que entre el 2,5 y el 4,2 por ciento de la población ya poseía anticuerpos contra el virus. Esto supone un total de 48.000 infectados como mínimo.
Como consecuencia, el porcentajes de fallecidos por coronavirus sería mucho menor que el que se ha establecido. Atendiendo a los datos de la investigación, los expertos revelaron una cifra bastante inferior. En el caso de Santa Clara, la verdadera tasa de mortalidad estaría entre el 0,12 y el 0,2 por ciento.
Según publica The Wall Street Journal, este no es el único estudio que invita a la positividad. Otro estudio realizado en la ciudad de Nueva York estableció que la tasa de infección real es diez veces mayor que la registrada. Y no solo en Estados Unidos. Este tipo de investigaciones se están llevando a cabo en diferentes países del mundo: Italia, Islandia, Alemania, Dinamarca... En todos ellos ocurre lo mismo: las cifras de infectados reales superan notablemente a los datos oficiales.