Los jóvenes representan un porcentaje cada vez mayor de nuevos casos de coronavirus en todo el mundo, una tendencia que alarma a los funcionarios de salud pública. El mayor riesgo se encuentra en los asintomáticos. Creen que no tienen la enfermedad, o no lo saben, y contagian. La situación de Estados Unidos, el país más afectado por la pandemia, preocupa, según los datos recogidos por The New York Times.
Según el medio estadounidense, en el estado de Arizona, abrumado por el coronavirus, las personas de 20 a 44 años representan casi la mitad de todos los casos. En Florida, que rompe récords de nuevos casos prácticamente todos los días, la edad promedio de los residentes positivos se estimó en 35 años (en comparación a los 65 de marzo).
De igual modo pasa en otros estados de grandes dimensiones. En Texas, los jóvenes representan la mayoría de nuevos casos, que se dan especialmente en centros urbanos. El gobernador detuvo el proceso de reapertura (desescalada) el pasado jueves después de que el sistema sanitario se colapsara. En uno de los condados del estado, Cameron, las personas menores de 40 años representan más de la mitad de los casos reportados recientemente.
"Lo que está claro es que la proporción de personas más jóvenes parece haber cambiado drásticamente. Es realmente bastante inquietante", señaló el profesor de epidemiología en la Escuela de Salud Pública de UTHealth en Brownsville, Joseph McCormick.
El patrón preocupa a las autoridades (alcaldes, gobernantes y funcionarios de salud pública) de cara al otoño. El aumento de casos entre los más jóvenes podría complicar los planes de desescalada. Los países se muestran ansiosos por reabrir escuelas y universidades, reanudar eventos deportivos y regresar a la vida 'normal', con una economía a pleno rendimiento.
Según los expertos, las personas con edades comprendidas entre los 20 y los 30 años son los que más probabilidades tienen de socializar, lo que plantea preocupaciones a causa de los asintomáticos, que ayudan a transmitir el virus a los grupos más vulnerables. En Estados Unidos los casos aumentan especialmente en el sur y oeste del país.
"Nuestra estimación sugiere en este momento que por cada caso que se informó, en realidad hubo otras 10 infecciones", señaló el director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el doctor Robert Redfield. Muchas infecciones del pasado no se habrían diagnosticado. Las personas jóvenes habrían ayudado a alimentar la transmisión.
Ninguna respuesta explica totalmente el aumento de casos entre los jóvenes, que tienen menos probabilidades de ser hospitalizados o morir por el coronavirus que las personas mayores, según confirman los datos de los CDC. "El efecto de coronavirus en las personas más jovenes actúa como un conector de transmisión para las personas que sí están en mayor riesgo", comentó el doctor Redfield. Alabama, Florida, Oklahoma, Carolina del Sur y Texas informaron sus totales más altos en un solo día esta semana, al igual que Montana y Utah. Los casos aumentaron en 29 estados este jueves.
En el condado de Miami-Dade, Florida, el número de casos entre personas con edades comprendidas entre los 18 y los 34 años aumentó cinco veces en un mes, más de mil, según confirmó esta semana el alcalde Carlos Giménez. Las personas tienen mayor riesgo si tienen sobrepeso o diabetes u otras afecciones médicas.
El condado de Dallas reportó que el 52% de los nuevos casos de junio son personas entre las edades de 18 y 40 años. Este registro supone un salto del 38% que los jóvenes representaron en marzo, según los datos de las autoridades sanitarias del condado.
En el condado de King, Washington, los jóvenes con edades comprendidas entre los 20 y los 30 años representan alrededor del 45% de nuevos casos. Otro salto en comparación al 25% de los jóvenes que se registraron en marzo, según la epidemióloga de Seattle, la doctora Judith A. Malmgren, quien asegura que el porcentaje real es aún mayor de lo que se está midiendo porque los jóvenes tienen menos probabilidades de ser casos sintomáticos. "El hecho de que pertenezcan a un grupo de edad con menos probabilidades de morir por COVID-19 no significa que vivan solos", sugirió.