No tiene freno y preocupa, como ha reconocido Fernando Simón. La curva de contagios del coronavirus en Cataluña vuelve a subir a niveles no vistos. La Consejería de Salud ha reportado hoy un total de 79.595 positivos confirmados de Covid-19, es decir, que ha sumado 1.293 casos desde el recuento ofrecido ayer. El número de fallecidos por esta enfermedad en la comunidad catalana es de 12.631 personas, cuatro más. El crecimiento más preocupante de nuevos pacientes con coronavirus se reflejan en las zonas sanitarias de Barcelona, sus dos áreas metropolitanas y Lleida --sobre todo por el Segrià, comarca confinada desde hace 12 días--. Entre las cuatro suman el 83,7% del aumento diario, con 1.082 casos.
De hecho, la ciudad de Barcelona y parte de su área metropolitana se preparan para reducir su actividad social tras el rápido aumento de casos positivos de coronavirus, 884 en un sólo día en toda la metrópolis, mientras que en toda Cataluña se han superado el millar de nuevos contagios en una jornada, 1.293.
Las principales organizaciones empresariales de Lleida han vuelto a pedir esta mañana "microconfinamientos" en lugares donde haya brotes y ayudas económicas para la comarca del Segrià, al tiempo que han denunciado la "improvisación" del Govern.
Quince entidades empresariales de la comarca han firmado un comunicado conjunto en el que consideran que el Govern ha "improvisado" en su gestión del coronavirus en Lleida y que eso ha provocado "una gran desconfianza, desconcierto e incertidumbre en los sectores empresariales".
Aseguran que el mundo empresarial leridano ha hecho "un gran esfuerzo inversor" para adaptar todas las actividades a las nuevas normas de seguridad e higiene recomendadas por las autoridades sanitarias, por lo que consideran que "el nivel de responsabilidad de los empresarios ha sido ejemplar".
Ante esta "gravísima situación", agravada a raíz del confinamiento más severo del Segrià, las entidades piden microconfinamientos en "edificios, empresas y otros lugares de concentración de positivos".
Asimismo, exigen no detener la actividad económica del territorio, con la autorización de la movilidad de los trabajadores de empresas con servicios "no esenciales" y, de no ser así, piden que la Administración se haga cargo de sus salarios y Seguridad Social.
Mantener los ERTE por "causas de fuerza mayor", aplazar los pagos de deudas tributarias, recibir ayudas para el pago de alquileres, así como ampliar los descuentos más allá del estado de alarma son algunas de las medidas que también piden los empresarios de Lleida.
Finalmente, consideran que es necesario lanzar una campaña para dinamizar la comarca a nivel "turístico, social y agroalimentario", con el objetivo de "recuperar la imagen dañada de Lleida.