Parecen hechos de otra pasta cuando, día a día, se enfrentan al coronavirus en primera línea de batalla, muchas veces sin las medidas adecuadas, pero ellos también pueden contagiarse. De hecho, hoy conocemos la historia del Dr. Fernando Lapuente, Cirujano de Clínica de la Universidad de Navarra que se incorpora al trabajo tras pasar un auténtico calvario del que llegó a pensar que no saldría.
Sufrió y luchó contra el coronavirus durante una semana terrible: “Quebrantamiento del estado general, tenía nauseas, tenía vómitos, tenía malestar, tenía fiebre… un suplicio que yo en algún momento pensaba que no sabía dónde iba acabar”. El temor de este cirujano Cirujano de Clínica de la Universidad de Navarra desapareció cuando ganó.
Tras pasar unos días en casa recuperándose, donde leía ‘El Quijote’, jugaba al ajedrez y hasta se atrevía a hacer ejercicio ha vuelto al trabajo pletórico. Nos lo demuestra subiendo de dos en dos los escalones que llevan a su consulta: “Por el momento parece que la cosa va bien”. Con los pulmones al 100% y también otro modo de ver la vida, tal vez después de haber visto la muerte tan cerca: “todo esto que ha ocurrido te da más ímpetu, más ganas, es lo que al final te da probablemente la felicidad “
Le vemos avanzando por los pasillos saludando a todos totalmente recuperado. Regresa a un mundo en el que nada es igual y vislumbra un futuro diferente para todos: “nos puede cambiar nuestra forma de vivir para los próximos años”.
Fernando hoy vuelve del hospital ante la ovación de sus compañeros, exactamente igual que hemos visto salir a tantas y tantas otras personas estos días. Como Manuel, que abandonaba entre lágrimas y agradeciendo a los sanitarios del hospital de Extremadura después de varios meses de convalecencia. Con ellos ya son más de 1500 personas las se han unido en las últimas 24 horas a la lista de vencedores en la que constan los nombres de más de 82000 pacientes.