Con la llegada del calor el uso del aire acondicionado se convierte en parte de la cotidianidad. Muchas personas están preocupadas por la utilización de este aparato y la propagación del coronavirus por lo que la Organización de Consumidores y Usuarios ha publicado una serie de consejos para disfrutar de un ambiente fresco en casa con total seguridad.
Desde la OCU recuerdan que para respirar un aire de calidad lo primero es ventilar diariamente y varias veces al día las diferentes habitaciones.
En los equipos de aire acondicionado y tratamiento de aire que están centralizados, muy habitual en oficinas y edificios comerciales, el aire se capta desde el exterior, luego se enfría y las máquinas lo ponen a circular por el edificio o inmueble.
En edificios grandes, puede ocurrir que parte del aire interior se recircule entre espacios, como una forma de ahorrar energía. A causa del Covid-19 se recomienda que no se recircule el aire y que todo el aire que circule proceda del exterior.
En la mayoría de los sistemas que usamos en casa los dispositivos Split o Multi-split, no hay entrada de aire desde el exterior y tampoco hay recirculación de aire entre los espacios. El aparato en la sala de estar enfría el aire que ya estaba en la sala de estar. Por tanto, no hay mayor riesgo de contaminación desde el exterior al usar el aire acondicionado.
Esa es la razón por la que se recomienda en este tipo de aparato que no garantiza la renovación de aire necesaria abrir ventanas y puertas con frecuencia.
Para hacer un uso eficiente y seguro del aire acondicionado la OCU aconseja comprar los aparatos más eficientes (A+++) . Esto auanque a corto plazo resulta más caro, porque cuestan más en el mercado, puede garantizar un ahorro de un 40% en el consumo de energía.
Se aconseja revisar todas las ventanas y puertas para que estén cerradas antes de encender el aire y que sean herméticas para evitar que escape. Un correcto aislamiento es fundamental, facilita el enfriamiento y evita que se malgaste energía. No debemos olvidar que la exposición continua a altas temperaturas también plantea riesgos para la salud.
Es necesario calcular de forma adecuada la potencia del aparato para adaptarla a las necesidades reales de cada familia. Una mayor potencia no significa mejores prestaciones. 2,5 kW de potencia son suficientes para enfriar 20 m2. El consumo de energía es elevado, llegando a los 36 kWh, si se mantiene encendido 24 horas, por lo que es recomendable apagarlo durante la noche y al ausentarse de casa.
Conseguir 5ºC por debajo de la temperatura exterior es suficiente para tener la sensación de frescor. Una temperatura de entre 24º y 26º es la más adecuada para combatir el calor, sin que repercuta en exceso en la factura de la luz.
Identificar el modo que favorezca el ahorro. El modo Eco consigue reducir el consumo en un 30% y el modo Night desconecta, además, el equipo pasadas unas horas.