España sigue siendo un país de fumadores. Según las últimas estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 22 por ciento de la población en nuestro país afirma fumar a diario, el dos por ciento es fumador ocasional, mientras que el 25 por ciento se declara exfumador. Por otra parte, más de la mitad se declara no fumador, siendo esto más frecuente en mujeres a partir de los 75 años.

Afortunadamente, cada vez más personas abandonan este hábito que es responsable de la muerte de más de 50.000 personas cada año solo en nuestro país. Si eres de los que han decidido dar el paso y te preguntas cómo limpiar tus pulmones y ayudar en este proceso a través de la alimentación y el ejercicio, toma nota de estos consejos.

El tabaquismo se relaciona directamente con un amplio abanico muy amplio de enfermedades, especialmente las relacionadas con laringe, esófago, boca, pulmón, colon e hígado. Los cigarrillos contienen hasta 4.000 sustancias químicas y muchas de ellas resultan nocivas para la salud. Por eso, el mejor favor que puedes hacerle a tu salud es dejar de fumar y, en este proceso, nada mejor para animarte a continuar que comenzar a notar cuanto antes los beneficios de limpiar tus pulmones.

Además, el tabaco no es el único causante de la presencia de partículas nociva en nuestros pulmones: la contaminación que afecta a las grandes ciudades (y a las no tan pequeñas) contribuye a empeorar su salud. Algunos síntomas negativos relacionados con ellos pueden ser poca capacidad pulmonar al inhalar, una peor resistencia física, pérdida del aliento a la hora de realizar actividades que no requieren gran esfuerzo, cansancio crónico... Con ello aumentan también las probabilidades de sufrir enfermedades respiratorias.

Para combatirlo, existen trucos y consejos para limpiar tus pulmones, y el principal de ellos es hidratarte, ya que el agua ayuda a eliminar toxinas a través de la orina y del sudor. Además una alimentación equilibrada te ayudará a limpiarte por dentro. Evita el consumo de grasa y azúcares en la medida de lo posible para que ésta no se acumule en la zona de tu abdomen y permita a tus pulmones expandirse lo necesario. Y es que esos kilos de más pueden elevar el diafragma, presionar tu caja torácica y reducir tu capacidad pulmonar.

Otro truco consiste en consumir alimentos que contribuyan a acelerar la limpieza de tu organismo. Uno de los es el jengibre, que puedes tomar en forma de infusión. Lo mismo se aplica al ajo o la cebolla, así como al romero, al hinojo, al eucalipto o la menta... No olvides consumir cítricos, especialmente el pomelo rosa.

Por otro lado, el ejercicio es un elemento clave en esta tarea de limpiar tus pulmones en un tiempo récord: como mínimo, dedica 30 minutos al día al ejercicio aeróbico, siempre dentro de tus posibilidades, para mejorar tu capacidad pulmonar y ayudar a eliminar toxinas de forma natural. Eso sí, evita hacerlo en zonas contaminadas. Puede ser un buen momento para planear escapadas al aire libre y largos paseos en plena naturaleza.

Otro gesto que puede ayudarte es mantener las estancias de tu hogar y de tu zona de trabajo aireadas, evitando en la medida de lo posible el uso de circuitos cerrados de aire. Además, los baños de vapor resultarán especialmente beneficiosos, especialmente en la primera etapa tras dejar de fumar, en la que tu cuerpo se animará a expulsar mucosidades y toxinas. Puedes aprovechar una ducha caliente o bien usar el método del recipiente lleno de agua y la toalla sobre la cabeza. Añade aceites esenciales como el de eucalipto o árbol de té si quieres potenciar este efecto.