"Soy una de las muchas enfermeras que están trabajando a destajo en este país en estos momentos tan complicados" así comienza una enfermera gallega uno de los duros relatos que le ha tocado vivir en esta crisis sanitaria.
A través de la web Enfermeiras En Loita, una de las profesionales sanitarias que están a pie del cañón tratando de frenar el Covid-19 ha decidido compartir el duro relato de Mario, uno de los tantos pacientes que pasan estos días por los hospitales.
Cuando ingresó, Mario era un hombre de 75 años con las patologías propias de su edad: hipertenso y diabético, un denominado paciente de riesgo pero que realizaba una vida completamente normal para su rango. Como a más de 42.000 personas ya en nuestro país, el coronavirus también le afectó, teniendo que ser ingresado.
Comenzó entonces el protocolo habitual: aislamiento y vivir en soledad una infección que cada vez se agravaba más, con una neumonía bilateral que provocó una infección generalizada. A pesar de la lucha de los sanitarios y del propio Mario, que no permitió que se acabaran las risas durante su aislamiento, finamente su corazón no pudo más.
Como él, en España 3.434 personas han perdido la vida por una pandemia que no deja de expandirse por todo el mundo. Y como su historia, miles de profesionales sanitarios viven día a día muertes sin casi el tiempo de pararse a pensar en ellas.
Aunque, como acaba su relato esta enfermera, muchas de estas pérdidas no serán fácilmente olvidadas: "Su muerte ha hecho aumentar las tristes estadísticas de damnificados por el Covid-19, pero para mí no será un número más. Para mí siempre será Mario."