La crisis del coronavirus ha hecho que laboratorios de todo el mundo emprendan una carrera sin freno en la búsqueda de una vacuna y tratamientos que ayuden a salvar vidas. En esta misión, precisamente, se encuentra inmersa la empresa escocesa TC Biopharm, de quien forma parte el grupo de cientificos que clonó a la oveja Dolly.
El equipo, que ya revolucionó el mundo de la ciencia en 1996, podría volver a hacerlo si, realmente, hayase el tratamiento tan ansiado. De momento, tal y como publican medios británicos, TC Biopharm basan su posible tratamiento en un principio que, afirman, ya les ha funcionado en pacientes con cáncer.
Así, según publica el 'Daily Telegraph', el equipo busca trasplantar las células de los pacientes inmunes a los enfermos de COVID-19, después de haber multiplicado las sanas. Se trata, en todo caso, afirma el asesor médico estratégico senior, el doctor Brian Kelly de “desarrollar algo que ataque a las células infectadas y no a las normales”.
En este sentido, agrega que los "pacientes que han luchado con éxito contra una infección viral, han expandido su propio sistema inmunológico y eso persiste después de eso para evitar que vuelvan a infectarse". Por este motivo, creen que su trabajo tendrá éxito y barajan que se implemente en el Sistema Nacional de Salud de Reino Unido en el mes de julio si resulta eficaz.