España ya es, después de Malta, el país de la UE con mayor porcentaje de población con pauta completa de vacunación contra el coronavirus. Una estrategia que va viento en popa con el objetivo de terminar agosto con el 70% de la población vacunada frente a la covid.
Sin embargo, a pesar del éxito de la vacunación, desde que comenzaron a administrarse las dosis contra el coronavirus, los bulos en redes no han dejado de crecer. Para no caer en estas mentiras, es importante contrastar siempre la información que leemos en redes sociales, y recurrir a fuentes de información oficial. Estos son algunos de los bulos que circulan por las redes que debes conocer para que no te engañen:
El Jefe de Servicio de Urología de Ruber Juan Bravo 39 y coordinador de la Unidad del Varón, Francois Peinado Ibarra, ha negado que las vacunas contra la covid19 reduzcan el tamaño del pene, como así lo demuestra la información científica disponible a día de hoy.
"La pérdida de longitud de pene puede darse por otras razones como la edad, el aumento de peso, cirugía por cáncer de próstata, tabaquismo, el uso de determinados medicamentos, enfermedad de La Peyronie u otro tipo de enfermedades", ha dicho.
Varias mujeres en Noruega han denunciado en redes que tras recibir la vacuna contra la covid de Pfizer un extraño efecto secundario: les crecieron los pechos. Al menos, eso dicen ellas. Sin embargo, los médicos explican que no se trata de un aumento de las mamas sino de una inflamación de los ganglios.
Los médicos señalan que está inflamación de las mamas es real y temporal. En realidad responde a una inflamación de los ganglios linfáticos, una reacción que dura una semana, según ha explicado el doctor Heinrich Bachmann.
En las últimas semanas, mujeres de diferentes estados de todo el mundo están reportando cambios en sus ciclos menstruales, alteraciones hormonales, e incluso crecimientos de pecho mencionado anteriormente tras haber sido vacunadas contra la covid19, tanto en una primera dosis como con las pautas completas.
¿Hasta qué punto existe una correlación? La Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) y la Sociedad Española de Inmunología (SEI) coinciden en lo mismo: Tranquilidad porque, actualmente, no hay relación ni evidencia científica entre ellas, más allá de los nervios, el estrés o la ansiedad que pueda generarse con la vacunación, pero por el acto de vacunarse, como puede suceder con cualquier otro evento de nuestra vida, y que puede llegar a ocasionarnos en las mujeres alteraciones menstruales.
No, no es cierto que la vacuna contra el coronavirus provoque casos de magnetismo, como afirma un bulo ampliamente extendido por algunas redes sociales.
Los imanes se pueden adherir sólo a objetos compuestos de ciertos metales. No todos los metales son magnéticos: ni el aluminio ni el oro lo son, por ejemplo. Las vacunas contra el COVID-19 autorizadas en la Unión Europea (UE) no contienen ningún metal. Por lo tanto, no tienen ningún poder magnético.
Además, la aguja de la inyección es muy fina. Incluso si con ella se inyectara una partícula metálica, su superficie sería demasiado pequeña como para que se adhiriese un imán.
¿De dónde sale entonces las imágenes de personas con cucharas y tenedores adheridos al cuerpo? Hay objetos que pueden mantenerse pegados a la piel gracias a su fuerza de fricción. Es eso lo que pasa, por ejemplo, con el truco con la cuchara, que se queda pegada a la nariz o a otras partes del cuerpo.
No, no está prohibido donar sangre después de haberse vacunado contra el coronavirus, tal y como afirman erróneamente algunos usuarios en redes sociales, aunque es las autoridades de distintos países recomiendan esperar antes de hacerlo 48 horas o más en caso de reacción a la vacuna.
No existe ninguna prohibición en España que impida que las personas vacunadas de COVID-19 pueden donar sangre.
Las vacunas del coronavirus no contienen un virus que pueda propagarse por el organismo y además se administran por vía intramuscular, no en el torrente sanguíneo. En este sentido, el Instituto Paul Ehrlich de Alemania afirma que no existe ningún problema a la hora de donar.
No es cierto que la Universidad de Almería haya encontrado derivados del grafeno en la vacuna de Pfizer contra la covid-19, como afirman mensajes difundidos en redes sociales que utilizan el análisis de una muestra de origen desconocido publicado en un documento sin valor científico.
En las últimas semanas ha logrado amplia repercusión a través de distintos canales, entre ellos las redes sociales Facebook, Instagram y Twitter, publicaciones basadas en el documento de un profesor universitario donde se asegura que la Universidad de Almería ha encontrado grafeno al analizar la composición de una vacuna de Pfizer/BioNTech contra la covid-19.
En realidad, no hay grafeno en ninguna de las vacunas contra la covid-19, cuya composición conocen al detalle las instituciones sanitarias encargadas de autorizar la administración de fármacos. El informe es un documento sin rigor científico del que se ha desmarcado la universidad y que fue elaborado por un profesor autor de otra desinformación relacionada con la covid-19.