Cantabria ha detectado 56 nuevos casos de coronavirus ayer sábado y este domingo, hasta las 10.30 horas, entre ellos un bebé de menos de un año, que ha sido ingresado en un centro hospitalario para controlar su evolución.
Según el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, el bebé se encuentra bien pero "es un lactante con un covid positivo y ha sido hospitalizado para controlar su situación".
El número de pacientes ingresados en Cantabria, ninguno de ellos en la UCI, se ha elevado a 18, dos más que ayer. Además del bebé, ha sido hospitalizada una persona de 98 años.
También se han detectado dos casos más en residencias de mayores, que suman ocho positivos en dos centros distintos, los mismos en las que ya había contagios. Una de ellas es una residente del primer centro en el que se notificaron positivos (la Residencia de Liencres)
De los 56 nuevos positivos, 32 han sido detectados el sábado y los 24 restantes entre la pasada medianoche y las primeras horas de esta mañana.
El número de casos activos en la región sube así a 332, de los que 334 están en cuarentena domiciliaria.
Según el consejero, se están detectando casos en personas jóvenes y hay varios niños contagiados además del bebé. "Que nadie piense que esto afecta solo a los viejos, puede afectar a los adultos, a los niños, y a personas que tengan una inmunidad comprometida", ha dicho en declaraciones a los periodistas, tras asistir al acto del Día de Cantabria en Cabezón de la Sal.
A la vista de los últimos datos, Rodríguez ha hecho un nuevo llamamiento a los jóvenes. "Esta es una epidemia que no distingue de edades y ellos pueden ser vectores para transmitir la enfermedad a otras personas, de ahí la importancia de cumplir las normas".
Ha afirmado también que "prácticamente la totalidad" de la población está cumpliendo con la obligación de llevar mascarilla pero "se le olvida otra de las reglas, que es la distancia social".
"No estamos en la situación precovid y por lo tanto no podemos hacer como que no pasa nada. Tenemos que mantener la distancia social, a poder ser de un metro y medio, y especialmente en aquellos sitios en los que no llevamos mascarilla como en la playa o cuando comemos en un restaurante", ha advertido.
Ha recordado que en esas situaciones no es obligatoria pero hay que mantener la distancia social "si no queremos seguir transmitiendo la enfermedad".
Sobre los casos que han aparecido en las residencias, ha insistido en que los residentes tienen que estar en cuarentena aunque hayan dado negativo porque cabe la posibilidad de que den un resultado positivo cuando se repiten los test.
Según ha explicado, eso es lo que ha ocurrido con una residente del primer centro en el que se detectaron casos; su PCR fue negativo y "se ha positivizado".
El consejero ha dejado claro también que el Gobierno no va a difundir los nombres de las residencias con positivos, porque la autoridad sanitaria "no puede señalar públicamente ni a las personas ni a las instituciones donde hay casos".
Rodríguez ha dicho que son esas instituciones las que deben comunicarlo a los usuarios y, en su caso, hacerlo público a través de los medios de comunicación si así lo consideran.