Uno de los efectos menos comprendidos de la infección por coronavirus es la "niebla mental, un síntoma neurológico que puede afianzarse entre los pacientes gravemente enfermos y que a veces persiste mucho tiempo después de la recuperación, provocando una especie de confusión.
Un nuevo estudio elaborado por investigadores de la Universidad Johns Hopkins, Baltimore, EEUU, ha detectado una posible pista neurológica en forma de grupos de células inusuales en el cerebro de personas que tenían covid19. Los hallazgos se publicaron en línea el 12 de febrero en la revista JAMA Neurology.
"Hablamos de una situación en la que los pacientes se sienten confusos en sus pensamientos. Es cuando estás extremadamente cansado y lento, y tu actividad mental simplemente no parece estar funcionando con tanta nitidez como de costumbre. Y se ha informado entre los pacientes con covid19 que aún reciben atención y, posteriormente, durante la larga fase de recuperación" señaló el principal autor del estudio, el doctor David Nauen.
"Pensamos que se debía a algo que afectaba al cerebro, porque sabemos que otros virus ciertamente pueden afectar el cerebro, a veces con graves consecuencias neurológicas", añadió Nauen, profesor asistente en el departamento de patologías de la Universidad Johns Hopkins, en Baltimore, según WebMD.
Los investigadores se propusieron entonces analizar los cerebros de los pacientes con coronavirus que habían fallecido a causa de la enfermedad. Entre abril y mayo de 2020, se realizaron autopsias en los cerebros de 15 pacientes covid seleccionados al azar, así como en dos pacientes que no habían sido infectados.
La primera sorpresa para los investigadores, explica Nauen, fue que "no había ninguno de los signos clásicos de enfermedad viral del cerebro, como inflamación y linfocitos", y la segunda sorpresa, en cambio, fue observar "células inusuales en los capilares, llamadas megacariocitos, que nunca había visto en el cerebro"
Un megacariocito "es una célula que normalmente vive en la médula ósea, donde producimos glóbulos rojos, entre otros. Produce las plaquetas que nos ayudan a coagular para sanar. "Es realmente inusual verlos en los capilares del cerebro, porque los capilares son como pequeños tubos finos que llevan oxígeno a todo el órgano", destacó el especialista.
Al final, el equipo del estudio encontró megacariocitos en los cerebros de un tercio de los pacientes con covid fallecidos. Entonces, ¿las formaciones cerebrales de megacariocitos explican la niebla cerebral de covid19? Pese a los datos, Nauen enfatizó que es prematuro caracterizar el hallazgo como prueba de causa y efecto.
"Saber que están ahí es el primer paso. Ahora tenemos que averiguar por qué están en el cerebro y qué les indica que lleguen al cerebro por error, si este tipo de inflamación que nunca hemos visto antes es responsable de la confusión mental y también puede estar contribuyendo a un mayor riesgo de accidente cerebrovascular", subrayó.
Mientras tanto, el doctor Larry Goldstein, presidente del departamento de neurología de la Universidad de Kentucky y codirector del Instituto de Neurociencia de Kentucky, ofreció una visión cautelosa de los hallazgos de Nauen.
"La 'niebla mental' no es una condición específica y no tiene criterios de diagnóstico definitorios. Puede ocurrir en asociación con una variedad de afecciones inflamatorias, enfermedades degenerativas, medicamentos, particularmente algunas quimioterapias contra el cáncer, y hospitalizaciones en unidades de cuidados intensivos, entre otros", comentó Goldstein.
Aún así, en el caso de la covid19, ¿podrían ser los megacariocitos la causa? Goldstein reconoció que la explicación es "plausible", pero también lo son una amplia gama de explicaciones, incluida la inflamación, la reducción del oxígeno en sangre, el accidente cerebrovascular, la reducción del flujo sanguíneo o "las complicaciones generales de la hospitalización por una enfermedad aguda que pone en peligro la vida".
Por lo tanto, es imposible saberlo si no hay escaneos cerebrales o informes detallados sobre el "estado cognitivo" de cada paciente, concluyó Goldstein. Por ahora, todo lo que se puede decir es que "hay una variedad de formas en que la lesión cerebral podría ocurrir en este entorno".