Las primeras autopsias muestran el daño del coronavirus en los pulmones
Según los resultados, "los pulmones aparecen manchados con áreas hiperémicas/hemorrágicas alternando con áreas rosadas"
El Hospital Policlínico de Milán (Italia) ha comenzado a realizar autopsias a pacientes con coronavirus. Hasta el momento se han realizado un total de 50, en casi todos los casos dirigidas a los pulmones. Es el estudio de casos más amplio a nivel mundial puesto que en China tan sólo se publicaron resultados de tres autopsias mínimamente invasivas.
Según los resultados que recoge 'Redacción médica', "macroscópicamente, los pulmones aparecen manchados con áreas hiperémicas/hemorrágicas alternando con áreas rosadas. Histológicamente, algunas áreas son severamente enfisematosas, con vasos sanguíneos enormemente dilatados (hasta 20 veces la norma) que a menudo reemplazan a los microtrombos".
MÁS
En muchas casos, "el daño alveolar difuso (DAD) es evidente, con descamación de neumocitos, formación de membranas hialinas y un exudado fibrótico. Aparece como un síndrome de alto flujo, con hepatomegalia y vasos porta dilatados con trombosis difusa en todos los niveles". Incluso el corazón "parece agrandado, siempre tiene un hidropericardio y una marcada hipertrofia ventricular izquierda (pero los pacientes hipertensos casi siempre están en anamnesis)".
En uno de los casos analizados, "observaron un trombo que obstruía casi por completo la vena cava superior y la aurícula derecha. A menudo han notado el ascenso del diafragma, lo que indica que en cierto punto los pulmones no se expanden, asociados con la hepatomegalia".
Según se indica en el estudio, el COVID-19 clásicamente da anosmia (pérdida del sentido del olfato) y ageusia (alteración cualitativa o cuantitativa del sentido del gusto). En este escenario, "la insuficiencia respiratoria podría ser causada por el daño directo del virus en los núcleos del tronco encefálico".
Uno de los autores señala que "en la sangre de los pacientes con infección hay un número muy alto de células endoteliales (expresión del daño endotelial causado directamente por el virus) y que estas células desencadenan una tormenta de citoquinas que recluta principalmente macrófagos". También es por esta razón "que altas dosis de cortisona pueden funcionar".
En este sentido, "se usó un fármaco anticomplemento (narsoplimab) en 6 pacientes que redujo drásticamente el número de células endoteliales plasmáticas ciruclantes (pero no se especificaron los puntos finales)", han concluido.